Elige tu idioma

Bienvenido a Escuchar y a Dar

Este blog, no pretende ser un diario de sus autores. Deseamos que sea algo vivo y comunitario. Queremos mostrar cómo Dios alimenta y hace crecer su Reino en todo el mundo.

Aquí encontrarás textos de todo tipo de sensibilidades y movimientos de la Iglesia Católica. Tampoco estamos cerrados a compartir la creencia en el Dios único Creador de forma ecuménica. Más que debatir y polemizar queremos Escuchar la voluntad de Dios y Dar a los demás, sabiendo que todos formamos un sólo cuerpo.

La evangelización debe estar centrada en impulsar a las personas a tener una experiencia real del Amor de Dios. Por eso pedimos a cualquiera que visite esta página haga propuestas de textos, testimonios, actos, webs, blogs... Mientras todo esté hecho en el respeto del Amor del Evangelio y la comunión que siempre suscita el Espíritu Santo, todo será públicado. Podéís usar los comentarios pero para aparecer como texto central enviad vuestras propuestas al correo electrónico:

escucharlavoz@yahoo.es

Oremos todos para que la sabiduría de Jesús Resucitado presida estas páginas y nos bendiga abundamente.

Página web de Escuchar la Voz del Señor

Página web de Escuchar la Voz del Señor
Haz clic sobre la imagen para verla

miércoles, 14 de octubre de 2009

Stanislawa Leszczynska, la «partera de Auschwitz» ayudó a nacer a 3.000 bebés en el horror nazi

* Actuó contra la orden de matar a los recién nacidos, los bautizaba a todos y es la muestra de que la vida siempre se abre paso y triunfa sobre la muerte, incluso en el campo de concentración
14 de octubre de 2009.-
Se llamaba Stanislawa Leszczynska. Era polaca y vivía una profunda vida religiosa, al mismo tiempo que ejercitaba su profesión de comadrona. En la Polonia de preguerra, todos la recordaban por su disponibilidad, cuando caminaba durante kilómetros para atender a las parturientas. Casada y madre de dos hijos, fue deportada al campo de concentración de Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial y destinada a la llamada «sala de maternidad» que, paradójicamente, era una sala de aniquilación de niños. En el campo, las madres eran necesarias para trabajar, los hijos eran una carga molesta y, por consiguiente, el célebre «doctor» nazi Mengele dio la orden de matarlos al nacer, ahogándolos en un cubo de agua. Estas operaciones fueron realizadas por «Schwester» Klara, partera alemana –que al término de la guerra fue encarcelada por infanticidio– y sus ayudantes. Leer más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario