Papa Francisco en la favela de Varginha: “Nadie puede permanecer indiferente ante las desigualdades que aún existen en el mundo”

"Ya sé que, cuando alguien que necesita comer llama a su puerta, siempre encuentran ustedes un modo de compartir la comida; como dice el proverbio, siempre se puede «añadir más agua a los frijoles». Y lo hacen con amor, mostrando que la verdadera riqueza no está en las cosas, sino en el corazón. Y el pueblo brasileño, especialmente las personas más sencillas, pueden dar al mundo una valiosa lección de solidaridad, una palabra a menudo olvidada u omitida, porque es incomoda"

25 de julio de 2013.- (13 TV / Camino Católico) «Nadie puede permanecer indiferente ante las desigualdades que aún existen en el mundo. Que cada uno, según sus posibilidades y responsabilidades, ofrezca su contribución para poner fin a tantas injusticias sociales». Para el Papa Francisco la visita a la favela de Varginha es una de las citas más importantes de este viaje. Se trata de la zona que se encuentra entre una avenida muy traficada y una ex-refinería que nació hace 73 años y que hasta el año pasado era el escenario de encuentros armados entre traficantes y consumidores de droga (la llamaban “la franja de Gaza” debido a la guerra continua que se vivía en sus calles). El año pasado fue “pacificada” gracias a la ofensiva de la policía. Desde esta periferia de la periferia, Francisco con su presencia, más que con sus palabras, lanza un mensaje a toda la Iglesia y al mundo entero. 
Esta mañana, después de recibir las llaves de la ciudad, el Pontífice atravesó nuevamente en el Fiat Idea la ciudad para llegar al complejo de Manguinhos, en donde se encuentra la favela de Varginha. Después, a bordo del “papamóvil” blanco, Francisco recorrió el último tramo del trayecto para llegar a la pequeña Iglesia dedicada a San Jerónimo Emiliani en el corazón de la favela. El Papa, a su llegada recibió un collar de flores con los colores de la JMJ, abrazó a los niños y a los enfermos, visitó la comunidad católica de la pequeña Iglesia de San Jerónimo, en la que además de bendecir el altar, ofreció un cáliz.

Después se encontró con los habitantes cerca de un pequeño campo de fútbol. En el vídeo se visualizan y escuchan la palabras del Papa Francisco a todos los presentes traducidas al castellano, cuyo texto completo es el siguiente: Leer más...