12 de septiembre de 2023.- (Camino Católico) Celebración de la Santa Misa de hoy, martes de la 23ª semana de Tiempo Ordinario, el Dulce Nombre de María, presidida por el P. José Blanco, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Evangelio: San Lucas 6, 12-19:
En aquellos días, Jesús salió al monte a orar y pasó la noche orando a Dios.
Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, escogió de entre ellos a doce, a los que también nombró apóstoles: Simón, al que puso de nombre Pedro, y Andrés, su hermano, Santiago, Juan, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago el de Alfeo, Simón, llamado el Zelote; Judas el de Santiago y Judas Iscariote, que fue el traidor.
Después de bajar con ellos, se paró en una llanura con un grupo grande de discípulos y una gran muchedumbre del pueblo, procedente de toda Judea, de Jerusalén y de la costa de Tiro y de Sidón.
Venían a oírlo y a que los curara de sus enfermedades; los atormentados por espíritus inmundos quedaban curados, y toda la gente trataba de tocarlo, porque salía de él una fuerza que los curaba a todos.
Evangelio: San Lucas 6, 6-11:
Un sábado, entró Jesús en la sinagoga y se puso a enseñar. Había allí un hombre que tenía la mano derecha paralizada.
Los escribas y los fariseos estaban al acecho para ver si curaba en sábado, y encontrar de qué acusarlo.
Pero él conocía sus pensamientos y dijo al hombre de la mano atrofiada:
«Levántate y ponte ahí en medio».
Y, levantándose, se quedó en pie.
Jesús les dijo: «Os voy a hacer una pregunta: ¿Qué está permitido en sábado?, ¿hacer el bien o el mal, salvar una vida o destruirla?».
Y, echando en torno una mirada a todos, le dijo:
«Extiende tu mano».
Él lo hizo y su mano quedó restablecida.
Pero ellos, ciegos por la cólera, discutían qué había que hacer con Jesús.
Camino Católico.- Rosario Dueñas, Mariqui, sufrió en su juventud un accidente que desfiguró su cuerpo y trastocó sus expectativas de vida. “Fue una experiencia dura, aunque no traumática; quizás por mi juventud ni era consciente de la magnitud de aquello”, recuerda en un vídeo testimonial de Mater Mundi TV.
* «Los chismes son una plaga en la vida de las personas y de las comunidades, porque traen división, traen sufrimiento, traen escándalo, y nunca ayudan a mejorar, a crecer. Un gran maestro espiritual, san Bernardo, decía que la curiosidad estéril y las palabras superficiales son los primeros peldaños de la escalera de la soberbia, que no conduce hacia lo alto, sino hacia abajo, precipitando al hombre a la perdición y la ruina. Que la Virgen María, que siguió amando incluso cuando escuchaba a la gente condenar a su Hijo, nos ayude a buscar siempre el camino del bien»
Vídeo completo de la transmisión en directo de Vatican News traducido al español con las palabras del Papa en el Ángelus
* «Deseo expresar mis condolencias al querido pueblo de Marruecos, golpeado por un terremoto devastador. Rezo por los heridos, por los que han perdido la vida -¡tantos! – y por sus familias. Doy las gracias a los socorristas y a todos los que trabajan para aliviar el sufrimiento de la gente; que la ayuda concreta de todos sostenga a la población en estos trágicos momentos: ¡estamos con el pueblo de Marruecos!»
1
Evangelio: San Mateo 18, 15-20:
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Si tu hermano peca, repréndelo estando los dos a solas. Si te hace caso, has salvado a tu hermano. Si no te hace caso, llama a otro o a otros dos, para que todo el asunto quede confirmado por boca de dos o tres testigos. Si no les hace caso, díselo a la comunidad, y si no hace caso ni siquiera a la comunidad, considéralo como un gentil o un publicano. En verdad os digo que todo lo que atéis en la tierra quedará atado en los cielos, y todo lo que desatéis en la tierra quedará desatado en los cielos.
Os digo, además, que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir algo, se lo dará mi Padre que está en los cielos. Porque donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos».
Evangelio: San Lucas 6, 1-5:
Un sábado, iba Jesús caminando por medio de un sembrado y sus discípulos arrancaban y comían espigas, frotándolas con las manos.
Unos fariseos dijeron:
«¿Por qué hacéis en sábado lo que no está permitido?».
Respondiendo Jesús, les dijo:
«¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus compañeros sintieron hambre?
Entró en la casa de Dios, tomó los panes de la proposición, que solo está permitido comer a los sacerdotes, comió él y dio a los que estaban con él».
Y les decía:
«El Hijo del hombre es señor del sábado».