“Me daba cuenta de todo, como una persona normal. Todo el mundo estaba tan acostumbrado a que yo no estuviera allí que no se dieron cuenta de que empecé a estar de nuevo presente. La cruda realidad de que yo iba a estar el resto de mi vida así, totalmente solo, fue un golpe para mí. Nadie mostrará nunca ternura hacia mí. Nadie me amará nunca. Estás condenado"
No hay comentarios:
Publicar un comentario