* «Asociarnos a María supone combatir la acción del mal en nosotros e imitar su pureza. Y para este combate contamos con el arma poderosísima del sacramento de la penitencia. El mismo Jesús nos dice que serán los limpios de corazón quienes verán a Dios… Asociarnos a María supone vaciarnos de nosotros mismos, de nuestros apegos y pasiones, para ponernos incondicionalmente al servicio de la voluntad de Dios»
No hay comentarios:
Publicar un comentario