Simon Estes, bajo-barítono, nieto de esclavos: «Hoy vivo para servir a Dios y a los niños… Mi madre decía que debía rezar por las personas que me discriminaban»

* «Llamé a mi madre llorando: “Madre, no me dejan cantar en las óperas de mi propio país”. Y mi madre volvió a repetirme: “Pues arrodíllate y reza por esas personas. Nunca te conviertas en una persona amarga, sigue siendo humilde y acabarás triunfando”. Obedecí»

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