* «El Señor me concedido muchos dones, me ha dado incluso una buena salud, que me ha permitido trabajar. Ahora —naturalmente— han comenzado ya los problemas de la vejez, pero el Señor me ha dado una buena salud. Yo, naturalmente que ha habido momentos de pereza, quizás errores, pero, en todos estos años, cuanto más he conocido el catolicismo, más se ha fortalecido mi fe. Gracias a Dios, nunca he tenido crisis de fe. Nunca las he tenido porque, cuando desde que caí en este “agujero blanco” que decía antes… No puedo negar la evidencia… Para mí hoy, el hecho de que Jesucristo es el Hijo de Dios, el hecho que María sea la Virgen, que Él sea su Hijo… es algo innegable, es algo evidente»
No hay comentarios:
Publicar un comentario