* «Yo llegué a Dios Padre y a Jesús a través de María y el Espíritu Santo. Tenía que ser así, porque mi padre terrenal me había hecho mucho daño, yo no tuve un padre amoroso, crecí sin padre. La imagen de padre era para mí la de un tipo peligroso. Yo no podía ver a Dios como Padre así, sin más. Pero el Espíritu Santo me hizo tomar contacto con María a través del Rosario. Y a través de María llegué a Jesús, y más tarde a Dios Padre. Rezando el Rosario me reconcilié con Dios Padre y perdoné a mi padre terrenal, y eso me ha sanado mucho»
Leer más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario