Cheri Bush, con 24 años, en la universidad «sentía que había defraudado a Dios con mis decisiones vitales. Mi abuela me regaló un rosario y al rezarlo vi que Dios me amaba»

* Desde entonces Cheri ha servido como ministro juvenil de la parroquia, catequista, cantante y lectora. Miembro de la Parroquia de Santa Mónica en Indianápolis, también sirve ahora como directora de promoción de misiones para Caridades Católicas en la arquidiócesis

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