* «Cuando entré en el convento de la Encarnación de Ávila de visita me vino ya ese despertar, un sentimiento, y supe que tenía que ver algo conmigo. Yo le dije al Señor: ‘a mí no me metas estas cosas en la cabeza, que ya lo tengo todo planeado’. Y es que yo quería acabar la carrera, estaba conociendo a un chico muy guapo, pensaba en la casa de la playa, niños preciosos… Y dije no al Señor. Monja, no. Estaba estudiando Enfermería y así das la vida por los demás, pero ¿a cuántas personas voy a cuidar? Y ¿a las que no voy a cuidar?”. Era ya evidente, ¿qué hago ya aquí? Si soy toda tuya, ¿qué hago aquí?… Ellas rezan por todo el mundo, yo no puedo cuidar a todo el mundo como enfermera, pero sí puedo rezar por todo el mundo. Esto es lo que quiero, y dije sí al Señor»
Camino Católico.- El convento de las carmelitas descalzas de Zarauz tiene desde este mes de febrero un miembro más con la entrada el pasado día 2 de febrero de Remedios Vizcarro, una joven de 25 años estudiante de Enfermería que deja su vida para entregarla por entero a Dios. Lo explica Javier Lozano en Religión en Libertad.
Remedios es natural de Guinea Ecuatorial aunque llegó a España hace seis años junto a toda su familia. Ella es la quinta de nueve hermanos, y al llegar a España se trasladó a Madrid porque no quería hacer una carrera, por lo que en la capital inició un módulo de Laboratorio.