CaminoCatólico.com.- Croacia no ha podido finalmente ganar el Mundial de Rusia, pero seguro que a lo largo de estas semanas se ha ganado el cariño de millones de católicos. Su fútbol ha cautivado a millones de aficionados de todo el mundo, y ha sido la fe inquebrantable de este grupo de futbolistas de un pequeño país de poco más de cuatro millones de habitantes la que les ha llevado hasta la final y ser ya historia viva de su país.
Y es que la religión es un elemento esencial para muchos miembros del equipo de Croacia. Su entrenador, Zlatko Dalic, ha dicho públicamente que “Dios está presente diariamente en mi familia y mi vida“, y se le ha podido ver durante los partidos del Mundial agarrando un Rosario bendecido en Medjugorje.