* «Mi relación con Dios es una relación de Padre a hijo, en la que si me enfado con Él, se lo digo; si tengo que pedirle ayuda, se la pido; si me he equivocado, se lo digo también… Hablo mucho con Él. A veces le doy las gracias y otras me enfado. Pero es una relación fantástica. Rezo todas las noches, le doy gracias por lo que tengo y, sobre todo, le pido que mis hijos estén bien, que para mí es lo más importante. Verás, yo cuando pienso en Dios y en la Virgen, los veo representados en la Esperanza de Triana y en el Cristo de las Tres Caídas, así que voy mucho a verlos. Necesito estar sentado con ellos un ratito y contarles mis cosas: “Ya has visto cómo está Carmen, echa una mano aquí, gracias por esto…”. Es una relación diaria»
Leer más...
En la noche..
-
Las luces se esfuman y todo alrededor pierde forma, perfil, realidad. Todo
se desvanece. Nos gana la tristeza, la nostalgia por lo que teníamos y ya
no ...
Hace 5 días