* «Aquello transformó mi sentir y mi compromiso cristiano, para decirle al Señor que Sí a todo. Descubrí que Jesús era esa persona ante la que descubrirme y decirle: aquí me tienes con todos mis defectos. Y así ha sido desde entonces. Desde que íbamos a casarnos mi mujer y yo, teníamos claro que Dios era el pilar de nuestra vida»
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