23 de septiembre de 2018.- (Caminocatólico.com) Ante los 150 mil fieles presentes en el Parque Santakos en la ciudad lituana de Kaunas, durante su homilía en la celebración de la Santa Misa, el Santo Padre hizo una reflexión sobre lo que significa el seguimiento a Jesús, un seguimiento que no está libre de “momentos de prueba y de dolor”. El Papa nos recuerda ésta realidad subrayando como “Jesús en tres ocasiones anunció su pasión”; y como los apóstoles “expresaron tres veces su desconcierto y resistencia”.
También el Santo Padre antes de la bendición final de la misa rezó la oración mariana del Ángelus en la que dijo: “Pidamos a María que nos ayude a plantar la cruz de nuestro servicio, de nuestra entrega allí donde nos necesitan, en la colina donde habitan los últimos, donde es preciso la atención delicada a los excluidos, a las minorías, para que alejemos de nuestros ambientes y de nuestras culturas la posibilidad de aniquilar al otro, de marginar, de seguir descartando a quien nos molesta y amenaza nuestras comodidades”. En el video se visualiza y escucha la Santa Misa y el rezo del Ángelus, traducidos al español.