* «Creemos que todos los que son salvos son salvos por los méritos de Cristo: ‘No hay salvación en ningún otro, pues bajo el cielo no se ha dado a los hombres otro nombre por el que debamos salvarnos.’ (Hechos 4:12). Sin embargo, una cosa es afirmar la necesidad universal de Cristo para la salvación y otra cosa es afirmar la necesidad universal de la fe en Cristo para la salvación. La fe es el único criterio capaz de relacionarnos correctamente, no sólo con la ciencia, sino también con la historia. Al hablar de la fe que justifica, san Pablo cita el célebre oráculo de Habacuc: ‘El justo por la fe vivirá’ (Ab 2, 4). ¿Qué quiere decir Dios con esa palabra profética, ya que es Dios mismo quien la pronuncia? Dios no resuelve el enigma de la historia, pero nos pide que confiemos en él y en su justicia, a pesar de todo. La solución no está en el cese de la prueba, sino en el aumento de la fe»