24 de enero de 2010.- Un informe masivo y repleto de fotografías, sometido a un gran jurado el pasado 14 de enero, detalla las escalofriantes prácticas de Kermit Gosnell, médico abortista, en la ciudad de Philadelphia en el Estado de Pennsylvania en los Estados Unidos de América. Los empleados de su clínica han dado testimonio de que ellos han asistido en el parto a “cientos” de niños recién nacidos vivos que respiraban, antes de que sus médulas espinales o sus cuellos fueran cortados para completar el aborto.
Kermit Gosnell fue arrestado el miércoles por ocho cargos de asesinato. Uno de los cargos fue un aborto mal realizado que causó la muerte de Karnamaya Mongar, una refugiada de Nepal de 41 años de edad. Los otros siete cargos son por los niños. Después de que sus restos fueron descubiertos y analizados por la policía, se pudo determinar que habían nacido vivos y posteriormente matados. Leer más...
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