Elige tu idioma

Bienvenido a Escuchar y a Dar

Este blog, no pretende ser un diario de sus autores. Deseamos que sea algo vivo y comunitario. Queremos mostrar cómo Dios alimenta y hace crecer su Reino en todo el mundo.

Aquí encontrarás textos de todo tipo de sensibilidades y movimientos de la Iglesia Católica. Tampoco estamos cerrados a compartir la creencia en el Dios único Creador de forma ecuménica. Más que debatir y polemizar queremos Escuchar la voluntad de Dios y Dar a los demás, sabiendo que todos formamos un sólo cuerpo.

La evangelización debe estar centrada en impulsar a las personas a tener una experiencia real del Amor de Dios. Por eso pedimos a cualquiera que visite esta página haga propuestas de textos, testimonios, actos, webs, blogs... Mientras todo esté hecho en el respeto del Amor del Evangelio y la comunión que siempre suscita el Espíritu Santo, todo será públicado. Podéís usar los comentarios pero para aparecer como texto central enviad vuestras propuestas al correo electrónico:

escucharlavoz@yahoo.es

Oremos todos para que la sabiduría de Jesús Resucitado presida estas páginas y nos bendiga abundamente.

Página web de Escuchar la Voz del Señor

Página web de Escuchar la Voz del Señor
Haz clic sobre la imagen para verla

domingo, 27 de abril de 2014

Misa completa en español de la canonización de San Juan Pablo II y San Juan XXIII

27 de abril de 2014.- (Radio Vaticano / Camino Católico) Con la lectura de la fórmula propia del rito de canonización, esta mañana el Papa Francisco declaró santos a San Juan Pablo II y San Juan XXIII, en una ceremonia histórica y sin precedentes en la que están reunidos cuatro Pontífices, con la participación del Sumo Pontífice Emérito Benedicto XVI. En el vídeo la Misa completa de canonización. Hasta el momento en que no se inicia la ceremonia el sonido es de ambiente. Luego, empieza la traducción al español.

1 comentario:

  1. Padre, escuchaste mis plegarias para santificar a Juan Pablo II y me sorprendiste con la buena noticia de la santificación de Juan XXIII por quien siempre te supliqué el eterno descanso. Gracias Señor.

    ResponderEliminar