* «El cristiano que reza pide a Dios ante todo que le perdone sus ofensas, es decir sus pecados, el mal que hace. Esta es la primera verdad de cada oración: aunque fuéramos personas perfectas, aunque fuéramos santos cristalinos que no se desvían nunca de una vida de bien, somos siempre hijos que le deben todo al Padre. Somos deudores sobre todo porque en esta vida hemos recibido mucho: la existencia, un padre y una madre, la amistad, las maravillas de la creación … Incluso si a todos nos toca pasar días difíciles, siempre debemos recordar que la vida es una gracia, es el milagro que Dios ha sacado de la nada. En segundo lugar, somos deudores porque, aunque consigamos amar, ninguno de nosotros puede hacerlo solamente con sus propias fuerzas. El amor verdadero es cuando podemos amar, pero con la gracia de Dios»
Video completo de la transmisión en directo realizada por 13 TV de la catequesis traducida al español y de la síntesis que el Papa ha hecho en nuestro idioma
Leer más...* «Amamos, ante todo, porque hemos sido amados, perdonamos porque hemos sido perdonados. Y si alguien no ha sido iluminado por la luz solar, se vuelve tan frío como la tierra en invierno. ¿Cómo podemos dejar de reconocer, en la cadena de amor que nos precede también la presencia providente del amor de Dios? Ninguno de nosotros ama tanto a Dios como Él nos ha amado. Basta ponerse ante un crucifijo para comprender la desproporción: Él nos ha amado y nos ama siempre a nosotros primero. Recemos, pues: Señor, incluso el más santo de nosotros no deja de ser deudor tuyo. Oh Padre, ¡ten piedad de todos nosotros!»
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