Comprometerse con el Señor comporta persecuciones, pero no hacerlo es vivir a la deriva / Por P. Javier Alonso

1 de diciembre de 2012.- (13 TV/ Camino Católico) Homilía del padre Javier Alonso en la eucaristía del 28 de noviembre de 2012, miércoles de la 34ª semana del Tiempo Ordinario, ofrecida por 13 TV, en la cual reflexiona sobre que la comodidad supone vivir a la deriva, sin comprometerse a nada. Cuando uno ama sufre. Cuando uno esta enamorado del Señor y se entrega también sufre. De Dios hemos aprendido a amar. El Señor ejerce sobre nosotros una atracción fuerte. Cuando uno se compromete con el Señor es que está preparado. Entregar la vida al Señor conlleva persecuciones, pero no hacerlo comporta sufrir soledad. Si nos decidimos por el Señor es que estamos preparados y que somos capaces de afrontar las voces interiores que nos invitan a no complicarnos la vida y superar todo cansancio.