«Mi vida como sacerdote no es fácil porque hay muchas cosas que hacer: Eucaristía, despacho, Cáritas, residencia de ancianos, los catequistas, los matrimonios, etc... El tiempo para entrenarme lo saco de horas tempranas o momentos en los que la gente descansa, como el mediodía o incluso de noche… No es incompatible ser deportista con ser cristiano o sacerdote… Estamos planteando una plataforma de ‘cristianos deportistas’, que nos reunimos una vez al mes, quedamos para entrenar y terminamos celebrando una Eucaristía. Cuando acudo a algún ‘Iron-Man’, muchos deportistas me preguntan que si tengo que correr, cómo celebro la misa del domingo y les respondo que la oficio a las cuatro de la madrugada en mi habitación. Muchos pegan en la puerta y me acompañan. Numerosas personas se van acercando a la Iglesia o grupos religiosos gracias a que Dios me usa a mí como instrumento para acercar a la gente a la Iglesia»
martes, 4 de abril de 2017
Padre Rafael Caro, párroco y corredor de ‘Iron-Man’: «Mi pasión es Dios y a través del deporte intento acercar a los demás a Él»
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