* «Descubrir cuál es el proyecto que Dios tiene para cada uno de nosotros es una tarea de toda la vida, pero por medio de la oración todo se alcanza. No es sencillo, la cruz pesa, pero nunca caminarás solo, Cristo la carga contigo y la hace yugo llevadero. Seguirle, a pesar de las dificultades y con todas las alegrías que también hay en el camino, es lo que garantiza la felicidad verdadera y, aunque parezca una propuesta que no es para ti, Dios siempre te espera, siempre te escucha, siempre te prepara algo mejor»
No hay comentarios:
Publicar un comentario