* Lourdes: «La vocación en mí ha estado desde siempre y Jesús me llamó desde muy pequeña, pero en la vida no todo sale siempre como esperamos y durante tres años más o menos olvidé y abandoné mi llamada y a Jesús por cosas del mundo que me atraían. Con el tiempo, Jesús no ha dejado de buscarme y se ha empeñado en mí cada día de mi vida»
* Gloría: «Jesús me ha ido enamorando el corazón sencillamente, poco a poco. He visto como Jesús tiene sed de mí y como yo tengo sed de Él. Mi corazón nunca ha descansado en otra cosa más que en Él. También he visto lo roto que está el mundo, lo destrozado que está el corazón del hombre sin Jesús»