Junto a su esposo Umberto, María llegó a Roma para dar testimonio de su curación por la apertura del nuevo Museo dedicado a Pío XII, el Papa que lideró a la Iglesia entre 1939 -1958, durante el difícil periodo de la Segunda Guerra Mundial y que con frecuencia es acusado -sin sustento histórico- de no haber hecho lo suficiente por los judíos víctimas de los nazis.
"Estoy convencida de que mi curación es un milagro gracias a la intercesión del Papa Pío XII. Me escuchó. Todos los que rezaron fueron escuchados", asegura la maestra en declaraciones a ACI Prensa.
Leer más...
No hay comentarios:
Publicar un comentario