domingo, 6 de abril de 2025
miércoles, 12 de marzo de 2025
Juan Modesto, abogado en medicina legal y forense, curado milagrosamente de un carcinoma renal por intercesión de Santa Teresa de Calcuta
Juan Modesto, abogado en medicina legal y forense, muestra el TAC médico que certifica su curación milagrosa de un carcinoma renal por intercesión de Santa Teresa de Calcuta
Camino Católico.- Juan Modesto, abogado en medicina legal y forense, relata a El Rosario de las 11 PM su milagrosa curación de un carcinoma renal tras una profunda experiencia espiritual, destacando su acercamiento a Dios, la intercesión de Santa Teresa de Calcuta y la transformación de su vida.
miércoles, 8 de enero de 2025
Cuatro milagros actuales de Cristo: Ana Hernández, científica, se quedó ciega y ve; Sara Quiroz, arquitecta, estaba paralítica y anda; y Sergio Rodríguez, enfermo terminal, que se cura 2 veces
Ana Hernández, científica, Sara Quiroz, arquitecta, y Sergio Rodríguez, economista, cuentan cómo vivieron los milagros que les sanaron
Camino Católico.- Hagan Lío, la serie de testimonios de Juan Manuel Cotelo e Infinito+1, ha publicado su 8ª entrega, que recoge tres historias de personas curadas milagrosamente en España, en años recientes. Es un capítulo titulado "Milagros". Las cuatro sanaciones las protagonizan tres persona: Ana Hernández, científica, que se quedó ciega y ve; Sara Quiroz estaba paralítica y anda; y Sergio Rodríguez, economista, enfermo terminal, que se cura 2 veces.
Vídeo de Infinito+1 del programa completo de Hagan Lío-Milagros en el que Ana Hernández, científica, Sara Quiroz, arquitecta, y Sergio Rodríguez, economista, cuentan su testimonio de cómo vivieron los milagros que les sanaron
No son curaciones rumoreadas ni leyendas antiguas: los tres protagonistas de los milagros hablan a la cámara, hablan sus parientes, hablan sus médicos, algunos tienen imágenes en vídeo del día de su sanación y las muestran, con los papeles de los médicos.
Ana Hernández fue a misa, sin fe, sin entusiasmo ni devoción... y se curó
Ana Hernández, que es científica, no tiene explicación para la sanación que Jesucristo obró en ella
El caso de Ana Hernández, científica, también a partir de su testimonio en un vídeo de Cotelo. Había sufrido siete neuritis en su ojo izquierdo, estaba convencida de que un día u otro quedaría completamente ciega, era cuestión de tiempo.
Lo interesante es que a su sanación no se le puede achacar ningún efecto placebo, histeria ni predisposición. Ella estaba bastante alejada de la Iglesia, y sólo recientemente había empezado a ir a un grupo de oración carismática porque le atraía la música y la alegría del grupo. Espiritualmente estaba más bien interesada en temas de terapias alternativas, aunque ya veía que no la llenaban por dentro.
Acudió al encuentro nacional anual de la Renovación Carismática Católica en Madrid, por ver el ambiente, sin fe. Su curación no fue nada "carismática": nadie le impuso manos, ni oró por ella de manera especial, ni ella pidió sanación.
Sucedió durante la misa, en el momento de la elevación. El vídeo de Cotelo no lo detalla, pero en otras ocasiones (como la revista Nuevo Pentecostés) ella ha detallado que quien presidía en ese momento era el cardenal Carlos Osoro, que no tiene ningún rasgo de entusiasmo carismático.
En el momento de la elevación, ella miró a la pantalla con letras de las canciones y se dio cuenta de que podía ver perfectamente. Los médicos detectaron que su nervio óptico estaba ahora perfecto. Luego descubrió que su madre llevaba años orando por ella y la curación de su vista. Desde entonces, su vida de fe cambio y en los últimos años dedica esas semanas de verano a volcarse en la organización del encuentro anual carismático.
Sara Quiroz: "Le miré a los ojos y vi a Jesús"
Sara Quiroz, arquitecta, se levantó de la silla de ruedas y comenzó a caminar, después que el padre Jaime Kelly rezara por ella
El otro caso sucedió con Sara Quiroz el 3 de julio de 2011 en otro encuentro nacional de la Renovación Carismática, pero el caso en sí es muy distinto. Ana apenas creía vagamente en Dios y se curó en misa, mientras que Sara era una joven de fe fuerte, ya veterana en Renovación Carismática, de padres peruanos, también veteranos en esta corriente eclesial, y se curó en una oración de intercesión en privado.
El predicador era el padre Jaime Kelly, un misionero irlandés con muchos años de servicio en Venezuela, popular por su oración de sanación, con una misa semanal para enfermos en Maracaibo. El lema del encuentro era "Levántate y anda", y eso enfurecía a Sara, que llevaba casi un año en silla de ruedas debido a un error médico. Todos los amigos carismáticos le decían "mira, Sara, 'levántate y anda'", y ella pensaba "sí, qué más quisiera yo".
Una crónica en el diario La Razón en 2011 recuerda aquel día. El periodista acudió a la asamblea un rato, luego entrevistó al padre Kelly en los camerinos, en el pabellón del salón de actos del Parque de Atracciones de la Casa de Campo de Madrid. "Reza por los enfermos y muchos dicen curarse. Con paciencia infinita atiende en los descansos a personas que le acosan pidiendo que rece por ellos imponiéndoles las manos. 'El signo de imponer las manos sobre los enfermos, con fe expectante, es importante. Lo usaba Jesús y lo usó San Pablo en Malta'", recogía la crónica. Justo cuando el periodista se iba, tras la entrevista, llegó Sara al camerino.
El padre Kelly rezó por ella, pero Sara dice que lo miró a los ojos y a quien vio fue a Jesús. "Y ahora, levántate y camina", le dijo Kelly. Y ella caminó bien y ya no dejó de hacerlo, y lo contó esa misma tarde ante la multitud allí reunida y quedó grabado. Eso fue en 2011. Ahora ella es una joven arquitecta, que se casó en 2020 en plena pandemia (otra aventura) y cuenta su historia de sanación. En la Renovación Carismática de Madrid muchos la conocen, ha trabajado con jóvenes y adolescentes y a veces dicen "es Sara, la del milagro".
En 2012 Sara Quiroz contaba así su sanación en este vídeo:
Sergio Rodríguez: curado de dos cánceres linfáticos
A la derecha, Sergio Rodríguez, economista, que se curó de dos cánceres, junto al médico que no podía creer los resultados de las pruebas y tardó una semana en decirle que la enfermedad había desaparecido
El caso de Sergio Rodríguez Cuadrado, economista, es también asombroso. Va ligado a la oración de sus seres queridos, a un paso por el santuario de Lourdes, a una forma de afrontar la enfermedad con serenidad, alegría y entereza. Dos veces los oncólogos le dijeron con rotundidad: "tus probabilidades de supervivencia son cero, despídete de tus seres queridos". También daban por casi seguro que la quimioterapia y radioterapia le dejaran estéril. Pero se curó por completo de dos cánceres linfáticos y es padre de 5 hijos.
El médico de Sergio accede a hablar en el documental, alaba la personalidad del milagrado e improvisa cosas sobre cómo la actitud ante la enfermedad puede ayudar o tener algo que ver. Pero sabemos que cada año mueren miles de enfermos con excelente actitud. La buena actitud es algo meritorio y valioso, sin duda, pero no cura cánceres. En este caso, Sergio, que ha reflexionado mucho sobre el tema, y sobre el valor de la vida, y cómo aprovecharla, ha escrito un libro al respecto titulado Una segunda oportunidad (publicado en Palabra en enero de 2024).
El resultado es un vídeo luminoso, de sanación, esperanza y alegría al rendirse a Dios, un Dios cercano que actúa, que a veces cura cuerpos de forma asombrosa, y que siempre quiere sanar corazones.
Sergio Rodríguez explicaba en este vídeo su doble sanación, a principio del año 2024:
viernes, 27 de diciembre de 2024
Belén Domínguez ante un tumor en la médula: «Dios me ha curado el alma y me ha convertido. Jesús me está guiando en cada paso, Él es el timón de mi vida»
Belén Dominguez junto a su novio, Emilio, desde su habitación en el hospital Universitario Ramón y Cajal / Foto: Instagram de Belén Dominguez @belendominguezb
* «Ha sido Dios el que ha venido a buscarnos y nosotros le dijimos que sí. Desde entonces ese viaje de enfermedad ha sido duro, pero nada que ver con lo que sería sin Dios, que ha dado una vuelta a mi vida… Comulgar es lo que más feliz me hace porque es mi mejor medicina. Empiezo el día feliz, con muchísimo gozo. Me despierto y ya estoy contenta… Ahora Cristo es lo primordial en mi vida. Gracias a Él tengo todo lo demás. Todo es gracias a Él, no soy yo»
Vídeo de 13 TV en el que Belén Domínguez y su novio Emilio cuentan su testimonio
Camino Católico.- Belén Domínguez, una joven española de 31 años, ha demostrado una fuerza y una fe muy firmes al enfrentarse a un diagnóstico de tumor medular. Su historia, compartida en el programa 'Ecclesia en Salida' de 13 TV, es un testimonio de esperanza y un ejemplo de cómo la fe puede ayudar a superar los momentos más difíciles. Una historia que también está plasmada en su libro 'La vida es bonita incluso ahora: Una historia real de superación y lucha'.
Al compartir su fe, Belén Dominguez afirma que “Dios me ha curado el alma y el cuerpo espero que Él quiera. Me he dado cuenta que Dios me ha convertido y que todo esto era para mi conversión, porque yo tenía una fe normal. Aunque estoy enferma con un cáncer de estadio cuatro, sin movilidad y sin nada, que es como lo más grave de todo. Yo me siento superlibre porque por dentro tengo a Dios y gracias a él tengo una maravilla en mi vida que no puedo creer, no puedo cuantificar".
Belén llevaba una vida normal, con planes de boda junto a su pareja, Emilio, cuando de repente recibió la noticia del tumor. “De repente nos dijeron eso y estamos los dos solos en la sala de urgencias con los neurocirujanos (...) y fue como shock”, relata Belén, describiendo el impacto inicial del diagnóstico. Tras una operación compleja y tratamientos agresivos que no dieron los resultados esperados, los médicos les sugirieron buscar un centro de cuidados paliativos.
Belén Domínguez junto a sus padres y su novio, Emilio / Foto: Instagram de Belén Domínguez @belendominguezb
La fuerza de la oración y la fe
Ante esta desgarradora noticia, Belén confiesa que perdió la esperanza. Sin embargo, Emilio la animó a seguir confiando. “Oye tú confía, tú sigue confiando y la esperanza no la perdemos porque aunque te hayan dicho ya que no hay salida médica, nosotros vamos a seguir pensando en que alguna solución puede haber”, le dijo Emilio. Juntos, rezaron fervientemente pidiendo una oportunidad para seguir luchando.
Milagrosamente, al día siguiente apareció un ensayo clínico adecuado para el tipo de tumor de Belén. “Escuchó nuestras oraciones y apareció un ensayo clínico. Vino el doctor a decirnos que había aparecido un ensayo justo para el tipo de cáncer de Belén”, cuenta Emilio con alegría.
A pesar de los duros efectos secundarios del tratamiento, Belén mantiene una actitud positiva y se aferra a su fe. “Cada vez lo llevamos mejor, porque yo creo que es cuestión de actitud, que es como siempre lo decimos y eso no nos ha faltado nunca”, afirma Belén. Su día a día en el hospital está marcado por la oración y la comunión diaria, que le brindan consuelo y fortaleza.
“Ha sido Dios el que ha venido a buscarnos y nosotros le dijimos que sí. Desde entonces ese viaje de enfermedad ha sido duro, pero nada que ver con lo que sería sin Dios, que ha dado una vuelta a mi vida. Siempre rezando el rosario digo que Dios me ha curado el alma y el cuerpo espero que Él quiera. Me he dado cuenta que Dios me ha convertido y que todo esto era para mi conversión, porque yo tenía una fe normal…. Ahora Cristo es lo primordial en mi vida. Gracias a Él tengo todo lo demás, Jesús me está guiando en cada paso, Él es el timón de mi vida. Todo es gracias a Él, no soy yo”, reflexiona Belén.
“Al final mucha gente se pregunta: ¿Por qué a mi me ha tocado la enfermedad? Pero nosotros como veíamos que no íbamos a obtener una respuesta […] dijimos, ¿para qué? Vamos a evitar ese por qué a mi, y vamos a buscar un para qué que al final nos llene más”, dice.
Cada día, desde su habitación repleta de estampas de santos e imágenes de la Virgen —a quien ha prometido rezar un Rosario cada día—, la joven sevillana saca la fuerza necesaria para transmitir con humildad un mensaje de esperanza a los más de cien mil seguidores que tiene en su cuenta de Instagram y a quienes atraviesan situaciones similares. “Dios quiere que haga mejores a los demás, y creo que mi papel aquí, a día de hoy, es evangelizar y dar ejemplo de mi fe. Yo soy un mero instrumento”, remarca.
“Hay muchísima gente que me escribe cartas y agradece que le esté ayudando a fortalecer su fe. Yo sé que el Señor está aquí presente conmigo y Él me lo está dando por algo”, transparenta.
A pesar de las dificultades, revela que Dios le manda pequeños regalos y señales cada día, y asegura que se siente inmensamente afortunada por poder transmitir su fe a los demás.
“Comulgar me hace feliz porque es mi mejor medicina”
Lo primero que Belén hace al despertar es recibir la sagrada comunión durante la visita del capellán del hospital, con quien ha forjado una especial amistad. “Realmente es lo que más feliz me hace porque es mi mejor medicina. Empiezo el día feliz, con muchísimo gozo. Me despierto y ya estoy contenta”.
Belén Domínguez junto al P. Juan Pedro / Foto: Instagram de Belén Domínguez @belendominguezb
“Ahora cada día rezo más, porque es cuando más feliz soy. A través de la oración he descubierto que Él es lo primero, Él es lo único, y gracias a Él tengo a Emilio, a mi familia, vienen mis amigos a verme… es todo gracias a Él, entonces yo acepto la enfermedad y estoy muy feliz”.
Dirigiendo la mirada hacia el cielo, Belén asegura confiar en la providencia y que “si en algún momento me quiere llevar, yo seré feliz porque me voy con Él, y sé que le dará la fortaleza a los que me rodean para afrontarlo”.
“Y si quiere me quedaré aquí, que es lo que yo le pido todos los días, porque me encantaría seguir glorificándolo y hacer el mayor apostolado que pueda, que ahora intento hacerlo desde una cama”.
Esta experiencia le ha enseñado a sacar lo mejor de cada situación y a disfrutar de cada instante. Aunque no siempre es fácil, remarca que el Señor le ayuda a no caer en la desesperación, a no ceder y a “responder siempre con una sonrisa”.
Emilio ha sido un pilar fundamental para Belén durante todo el proceso. Su amor y apoyo incondicional la han ayudado a mantener la esperanza y a afrontar los desafíos con valentía. "Es tan guay tenerle a mi lado. De verdad, gracias Señor por ponérmelo a mi lado. Es que no he podido soñar con alguien mejor. Estoy feliz", declara Belén con emoción. Pese a que no se han podido casar enfatiza que “no ha podido ser, pero Dios ha querido que estemos más unidos que nunca. Aunque nuestros planes han cambiado, hemos descubierto que los planes de Dios son perfectos y que tengo que estar aquí por algo”, cuenta emocionada al hablar de su compañero de vida, su “alegría y gasolina”, quien le sonríe con admiración desde una esquina de la habitación.
Belén Domínguez con sus inseparables amigas / Foto: Instagram de Belén Domínguez @belendominguezb
Además del apoyo de familiares y amigos, Belén se siente muy agradecida a su familia del hospital de la planta 7 del Hospital Ramón y Cajal por haberla tratado tan bien: "Aunque esté encerrada desde hace un año entre cuatro paredes, me siento más libre que nunca, porque la libertad tiene que ser interior. Al final, cuando tú por dentro te sientes libre y tienes a Dios contigo, todo es posible. Como dice Emilio, hay que valorar cualquier cosa, incluso levantarte para ir al baño" relata.
"Aunque estoy enferma con un cáncer de estadio cuatro, sin movilidad y sin nada, que es como lo más grave de todo. Yo me siento superlibre porque por dentro tengo a Dios y gracias a él tengo una maravilla en mi vida que no puedo creer, no puedo cuantificar".
El cantante Alejandro Sanz visitó por sorpresa a Belén Domínguez en el Hospital / Foto: Instagram de Belén Domínguez @belendominguezb
miércoles, 1 de mayo de 2024
Esmeralda Salazar, con cáncer, cambió la quimio por el Santísimo: «Le dije al doctor: ‘Tengo a Dios que es el mejor médico’ Yo y mi hijo, enfermo, fuimos sanados por Cristo»
* «Le dije a mi médico: ‘No quiero seguir con el resto del tratamiento. Me respondió: ‘Qué bueno que creas en tu Dios, pero ese Dios no existe’. Le dije: ‘¡Sí existe, yo lo conozco! Y no quiero someterme a la segunda sesión de quimioterapia porque siento que es veneno para mi cuerpo. Fui ante el Santísimo Sacramento y le dije: ‘Señor, Tú sabes lo que yo siento en mi cuerpo con ese medicamento. Pero yo confío en Ti, y sé que Tú me vas a sanar»
lunes, 1 de abril de 2024
Davide Fiorillo murió de leucemia con 8 años: veía a Jesús, la Virgen, los ángeles y cambió la vida de sus padres: «Comprendimos que Jesucristo está vivo en la Eucaristía»
* «Sabiendo cuánto le gustaba comprar juguetes, le dije: ‘¿Ves cuánto dinero te han regalado? ¡Tienes que decirle a los angelitos y a la Virgen que te curen para que puedas gastarlo!’. Me contestó enseguida, sin pensárselo: ‘No, papá. Me están esperando. Me tengo que ir’. ¿Se imaginan a un niño de ocho años hablando así de su muerte, con una certeza y una serenidad indescriptibles? Davide nos mostró que la muerte no es el final, sino el principio de la vida. Antes de ir al cielo, se hizo coser un traje especialmente para volar con los angelitos: lo eligió todo hasta el último detalle, y cuando se lo probó, parecía que se estaba preparando para una boda, ¡para el día más hermoso de su vida!»
jueves, 21 de marzo de 2024
Sergio Rodríguez ha padecido dos cánceres «mortales» y dos «milagros»: «Me he encontrado con el amor de Dios, me ha llenado el corazón y quiero transmitirlo a los demás»
* «Recuerdo cuando mi hija tenía ocho años y me decía: ‘no quiero que te mueras’. Yo no podía decirle que no porque qué padre sería si le mintiese. Tuve que decirle: ‘hoy estoy vivo, vamos a disfrutar de hoy, mañana Dios dirá e iremos viendo cada día qué quiere Dios de nosotros’… Pero al final en ese sufrimiento es donde uno se encuentra realmente con Dios y ahí lo he visto. Sigo siendo el mismo gruñón de siempre hago muchas más cosas de manera voluntaria y entregada pensando en el bien de los demás que antes no hacía. Ahora me siento más lleno del amor de Dios. Yo no he hecho nada, es Dios quien me ha dado una felicidad que no tenía antes»
El testimonio en vídeo que Sergio Rodríguez Cuadrado ha compartido con los antiguos alumnos de la Universidad Francisco de Vitoria, en la que él mismo estudió Administración y Dirección de Empresas
Camino Católico.- Sergio Rodríguez Cuadrado vive agradecido porque sabe que todo es un regalo. El tiempo que ahora disfruta con su mujer, sus cinco hijos, sus familiares, amigos y los hermanos con los que vive la fe en el Camino Neocatecumenal en Madrid es pura gracia pues no una vez sino dos ha vencido a linfomas no curables para los que le habían dado un tiempo máximo de vida.
Ahora este padre de familia relata su testimonio, echa la vista atrás y ve como Dios ha actuado en su vida no sólo al poder curarse de dos cánceres sino sobre todo a haberlos podido pasar desde la fe, que es lo que junto a los médicos le mantuvo con vida.
lunes, 22 de enero de 2024
El hijo de Fernando Pedro Nieto Giménez sanado de cáncer por intercesión de Juan Pablo II: «Los médicos me dijeron: ‘Es como si el cáncer nunca hubiera existido’»
* «El médico nos dio un informe por escrito y emprendimos el camino de vuelta a casa. Hicimos todo el viaje en coche prácticamente en silencio, llorando y dando gracias a Dios. Fue un gran martes de 2009. Tras llegar a nuestra ciudad, fuimos directamente a la parroquia, y ante el Santísimo Sacramento dimos gracias una vez más. Pocos días después tuvimos una consulta en el servicio de hematología del Hospital Universitario de Albacete con el médico encargado del caso de nuestro hijo. No podía creer lo que veía en el informe. El resultado era el mismo que antes. Nos pidieron que no interrumpiéramos el tratamiento y que lo siguiéramos hasta el final. Todos los días rezaba delante de la foto de Juan Pablo II que me llevé de la capilla del hospital»
jueves, 23 de noviembre de 2023
Tammy Peterson era protestante, padeció un cáncer renal mortal, rezó el rosario con uno bendecido por el Papa Francisco, hizo una novena, se curó y se ha hecho católica
* «El médico dijo: ‘Lo siento, pero hicimos otra biopsia y lo que tienes es mucho más agresivo de lo que pensábamos. Creemos que te quedan 10 meses de vida’. Ni siquiera me ofrecieron quimioterapia o radioterapia, dijeron que este tipo de cáncer mataba a todos y que no había tratamiento para él»
lunes, 9 de octubre de 2023
Andri Jesús Cardeña sanado a los 11 años de un tumor cerebral maligno «Estaba durmiendo, bajó la Virgen y me dijo: ‘Ven, Andri, yo te voy a curar’… ‘Ya estás curado’»
* María de Jesús Cardeña, madre del muchacho: «La verdad es que yo me había olvidado del Divino Niño Jesús, porque yo antes había hecho sus novenas; y cuando Andri se enfermó, me pidió que le cantara las canciones del Divino Niño. Mi hijo se aferró al Divino Niño, y a Él yo también le fui pidiendo. También le pedí a la Virgen; a Ella y a Cristo Jesús me aferré», expresó. La Virgen y el Divino Niño Jesús estuvieron al momento en que operaron a mi hijo. Porque cuando lo diagnosticaron el tumor era maligno, pero cuando se lo quitaron ya era benigno»