* «Yo no escuché en seguida el llamado del Señor porque ¡no quería ir a África! y me fui a estudiar Economía a la Universidad de Manchester. El pensamiento de que Dios me llamaba siempre estaba presente. Con el paso del tiempo noté que, aunque disfrutaba de mi trabajo, cuando enseñaba la fe, me sentía más realizada. Tuve una experiencia parecida a la de los discípulos del camino a Emaús que dijeron: “¿No ardía nuestro corazón dentro de nosotros mientras nos hablaba en el camino?” (Lc 24, 32). Finalmente, en 2005, durante unas vacaciones en Roma, fui a la gruta de “Tre Fontane” (Tres Fuentes) donde apareció la Virgen de la Revelación. Una vez allí le pregunté al Señor qué quería que hiciera con mi vida… El aspecto más importante para la evangelización es mantener firme y con entusiasmo la fe que deseamos transmitir. Con respecto a la comunicación, se trata solo en parte de las técnicas que empleamos. Hoy, nuestra juventud necesita el testimonio de aquellos que aman a Jesucristo y creen en la fe que profesan. El Señor necesita auténticos testigos del mensaje del Evangelio que sean valientes para hablar de la belleza de la verdad a un mundo relativista»
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viernes, 2 de abril de 2021
Emanuela Edwards, trabajó en la banca y de consultora pero es monja y guía de los Museos Vaticanos: «Siempre amé al Señor. El amor por Él sobrepasa todos los demás amores»
* «Yo no escuché en seguida el llamado del Señor porque ¡no quería ir a África! y me fui a estudiar Economía a la Universidad de Manchester. El pensamiento de que Dios me llamaba siempre estaba presente. Con el paso del tiempo noté que, aunque disfrutaba de mi trabajo, cuando enseñaba la fe, me sentía más realizada. Tuve una experiencia parecida a la de los discípulos del camino a Emaús que dijeron: “¿No ardía nuestro corazón dentro de nosotros mientras nos hablaba en el camino?” (Lc 24, 32). Finalmente, en 2005, durante unas vacaciones en Roma, fui a la gruta de “Tre Fontane” (Tres Fuentes) donde apareció la Virgen de la Revelación. Una vez allí le pregunté al Señor qué quería que hiciera con mi vida… El aspecto más importante para la evangelización es mantener firme y con entusiasmo la fe que deseamos transmitir. Con respecto a la comunicación, se trata solo en parte de las técnicas que empleamos. Hoy, nuestra juventud necesita el testimonio de aquellos que aman a Jesucristo y creen en la fe que profesan. El Señor necesita auténticos testigos del mensaje del Evangelio que sean valientes para hablar de la belleza de la verdad a un mundo relativista»
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