* «El corazón trabaja sólo al 50 por ciento y tuvo que ser ingresado en el hospital en varias ocasiones por falta de oxígeno. Hace cuatro años que comenzó todo. Por su situación y por su edad es muy riesgoso que sea sometido a una cirugía a corazón abierto y por eso se ha decidido no operarlo, porque ahí podría quedar. Su Bautismo es un sueño hecho realidad. Yo, siendo católica, quería que él también pudiera tener esta gracia, esta ‘ventaja’. A él le queda poco tiempo por la salud y quería que cuando se vaya, también pueda llegar al cielo»