Elige tu idioma

Bienvenido a Escuchar y a Dar

Este blog, no pretende ser un diario de sus autores. Deseamos que sea algo vivo y comunitario. Queremos mostrar cómo Dios alimenta y hace crecer su Reino en todo el mundo.

Aquí encontrarás textos de todo tipo de sensibilidades y movimientos de la Iglesia Católica. Tampoco estamos cerrados a compartir la creencia en el Dios único Creador de forma ecuménica. Más que debatir y polemizar queremos Escuchar la voluntad de Dios y Dar a los demás, sabiendo que todos formamos un sólo cuerpo.

La evangelización debe estar centrada en impulsar a las personas a tener una experiencia real del Amor de Dios. Por eso pedimos a cualquiera que visite esta página haga propuestas de textos, testimonios, actos, webs, blogs... Mientras todo esté hecho en el respeto del Amor del Evangelio y la comunión que siempre suscita el Espíritu Santo, todo será públicado. Podéís usar los comentarios pero para aparecer como texto central enviad vuestras propuestas al correo electrónico:

escucharlavoz@yahoo.es

Oremos todos para que la sabiduría de Jesús Resucitado presida estas páginas y nos bendiga abundamente.

Página web de Escuchar la Voz del Señor

Página web de Escuchar la Voz del Señor
Haz clic sobre la imagen para verla

domingo, 2 de abril de 2017

Papa Francisco en homilía en Carpi: «Ser testigos que resucitan la esperanza de Dios en los corazones abrumados por la tristeza»

* «Sentimos dirigidas a cada uno de nosotros, las palabras de Jesús a Lázaro: "¡Sal!"; sal del atasco de la tristeza sin esperanza; disuelve las vendas de miedo que obstruyen el camino; los lazos de las debilidades y de las preocupaciones que te bloquean, repite que Dios desata los nudos. En el seguimiento de Jesús aprendemos a no atar nuestras vidas en torno a los problemas que se enredan: siempre habrá problemas, siempre, y, cuando resolvemos uno, puntualmente llega otro. Podemos, sin embargo, encontrar una nueva estabilidad, y esta estabilidad se llama: Jesús, que es la resurrección y la vida: con él la alegría habita en el corazón, renace la esperanza, el dolor se transforma en paz, el temor en confianza, la prueba en ofrenda de amor. Y aunque los pesos no faltarán, siempre estará su mano que levanta, su Palabra que alienta y nos dice a todos, a cada uno de nosotros: "¡Sal! ¡Ven a mí! ". Nos dice a todos: no tengáis miedo»

No hay comentarios:

Publicar un comentario