* “Un sacerdote nos dio a conocer el Cottolengo de Alicante en Navidad. Al llegar el verano, me fui 15 días como voluntaria. A partir de entonces, aprovechaba todo el tiempo libre que tenía para irme allí. El Señor me llamaba”
* “Me siento feliz y gozosa de tener al Señor como esposo. Y de poder realizar esta labor… Como tengo al Señor, no echo de menos nada.”
* “Aquí también me realizo como madre aunque no haya tenido hijos. La función que hago también es de madre”
15 de junio de 2012.- (Olga Merino - Fotografía superior: Joan Puig / El Periódico / Camino Católico)Una treintena de monjas, hermanas Servidoras de Jesús, atienden a 168 enfermos, pobres e incurables, en el Cottolengo de Barcelona. Sabina Ana Rodríguez Valenzuela (Benidorm, 1984) -en la imagen superior derecha- es una de ellas.
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viernes, 15 de junio de 2012
Hermana Sabina Ana, cocinera del Cottolengo: "Quien realmente cuida a los enfermos es el Señor. Nosotras solo somos instrumentos de su obra"
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