* «Quiero que la sanes y que cuando vaya de nuevo al doctor, ya no encuentre nada y que no haya ninguna explicación científica para eso. Si me concedes eso, voy a testimoniarlo”, fue el pedido y la promesa. Yo cuando eso no sabía ni rezar el rosario y en ese lugar me puse a rezar todo lo que conocía. La Virgen me cumplió al dedillo con todos los detalles que le pedí, fue como que me dijera ‘basta, ya no te cuestiones y comienza a creer’»