Ese niño que contemplamos es Dios. Jesús nace en una familia humana fruto del amor de una familia divina: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Estamos llamados todos los seres humanos a formar sagradas familias fruto de lo que dice San Juan: "la Vida se manifestó, y nosotros la hemos visto y damos testimonio". ¿Hemos tocado con nuestras manos la Palabra de Vida? Tocar es más que ver. Es una relación física e interior. ¿Hemos leído, digerido y convertido en Vida en nuestra familia el Verbo encarnado en el Niño Dios? ...Leer más...
lunes, 25 de agosto de 2008
La familia debe ser una escuela práctica del perdón: No hay amor sin perdón / Autores: Conchi y Arturo
Etiquetas:
Conchi y Arturo,
curación del alma,
familia,
Heridas infancia,
hijos,
matrimonio,
neditación,
oración de sanación,
reflexión,
relaciones,
Santísima Trinidad,
vocación
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario