Elige tu idioma

Síguenos en el canal de Camino Católico en WhatsApp para no perderte nada pinchando en la imagen:

viernes, 26 de octubre de 2012

La escritora camboyana Claire Ly, superviviente de Pol Pot, explica su conversión de budista a católica: «Sentí que Dios era tan grande que se arrodillaba ante mi libertad»

* En los campos de concentración mataron a sus padres y a su marido: “Cuando tuve que asistir al fusilamiento de mi familia, los sentimientos de rebelión y el odio invadieron todo mi ser. Era imposible para mí mantener la calma en aquella vorágine de violencia. Busqué, tal y como sugiere el budismo, un objeto mental sobre el que volcar toda mi negatividad, al que llamé ‘el Dios de Occidente’, al que me dediqué a insultar. Durante un tiempo, fue mi único interlocutor. Poco a poco me di cuenta de que este ‘Dios de Occidente’ me iba acompañando en mi supervivencia, y que mi fuerza no provenía de mí misma, sino de algún Otro. Sin embargo, todavía no acertaba a comprender qué ocurría”
* “Después de vivir durante cuatro años en el campamento de Pol Pot, acompañada de algún modo por el sentimiento de este ‘Dios’, pude al fin exiliarme a Francia, donde un día cayó en mis manos la encíclica Dives in Misericordia de Juan Pablo II. Al leerla me entraron ganas de leer el Evangelio. Aquella fue una lectura que me fue preparando para acoger, al principio, las palabras de Jesús de Nazaret como las de un gran hombre, un gran maestro”
26 de octubre de 2012.- (Mar Velasco / Religión en Libertad / Camino Católico) En los campos de concentración de la Camboya de Pol Pot, Claire Ly perdió a su marido y a sus padres, fusilados por el régimen de los jemeres rojos. De aquel infierno salió milagrosamente viva, y en aquellos años del genocidio comunista maduró su conversión del budismo al cristianismo. Una conversión que no fue repentina, sino el resultado de un largo camino que la ha llevado a reconocerse como una persona completamente renovada en su encuentro con Cristo, sin necesidad de renunciar a sus raíces ni a su tradición. Exiliada en Francia desde 1979, escritora, profesora y madre de tres hijos, se convirtió al catolicismo en 1984, a los 36 años. Hoy, a través de sus conferencias, comparte su experiencia humana y espiritual e invita incansablemente a promover el diálogo entre ambas religiones. Leer más...

No hay comentarios:

Publicar un comentario