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domingo, 3 de octubre de 2021

Anthony Enitame: «Llegué en patera, bebí mi orina para sobrevivir y Dios me llamó a ser sacerdote»

 


Camino Católico.-  Anthony Enitame Acuase es natural de Nigeria y le falta poco para  cumplir 30 años, llegó en patera a España y actualmente está estudiando quinto curso en el Seminario Conciliar San Bartolomé de Cádiz, porque “Dios me llamó a ser sacerdote”.

Durante meses, como tantos otros africanos, cruzó el desierto y se embarcó hacia España en busca de una vida mejor a través de la que ayudar a su familia. En su caso, además, con el convencimiento de que era España el lugar donde Dios le haría ver su voluntad, a la que no acababa de dar forma.

Fue un viaje largo, a través del desierto desde Nigeria a Marruecos. No tenían apenas con qué sobrevivir. En Marruecos subió a una patera para llegar a España. ”Tuve que beber mi orina para sobrevivir”, explica en este testimonio en el programa ‘Ecclesia’ de 13 TV.

Leer el testimonio de Anthony Enitame

domingo, 15 de agosto de 2021

Anthony Enitame, 29 años: «Era protestante, llegué en patera a España, bebí mi orina para sobrevivir y creo que el Señor me hizo fuerte para el sacerdocio al que me llamó»

 


* «Yo no pertenecía a la Iglesia, y vi una película en la que aparecía un sacerdote que tenía una vida plena, una gran intimidad con Dios y con el pueblo de Dios, que siempre rezaba y, tras la oración, tenía una gran alegría… en ese tiempo, yo no sabía que un ser humano podía tener esa intimidad con Cristo y esa entrega al pueblo de Dios. Vivir más allá y vivir con los pies en la tierra. Me gustó y, a partir de ese momento, mi vida no fue igual. Todos los días pensaba en aquella vocación y quería conocer más a Cristo para darlo a conocer a los demás… El padre Salvador, muy enfermo antes de morir, en el hospital, me dijo `ve al seminario, inténtalo. Tienes que saber si, realmente, Dios te está llamando porque en tu vida se ve algo especial’. Yo le decía ‘déjalo, de verdad…’ pero al final fui. Y aquí sigo»

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viernes, 13 de agosto de 2021

El padre Gaétan Kabasha, antes de ser sacerdote, sobrevivió a un genocidio, dos guerras, deportaciones y detenciones: «Viví como un prófugo y vi la mano de Dios»

 


* «Mi vocación era el elemento que mantenía viva mi esperanza. Refugiado o no, tenía que ser sacerdote. Habiendo agotado mis recursos humanos, me abandoné en manos de Dios e imploré su ayuda. Él, que me había salvado del cólera, las aguas contaminadas, la miseria y el hambre en los campos, no iba a abandonarme ahora»

Vídeo del programa Donde Dios Llora, producido por CRTN,  con el apoyo de ACN, en que el padre Gaétan Kabasha explica su testimonio pormenorizado en una entrevista realizada por María Lozano

* «Madrid supuso un renacer en todos los sentidos, y cuanto más recordaba mi pasado, más veía la mano invisible de Dios a mi lado. Sobre las ruinas de mi historia había nacido una rosa. Empezaba una nueva vida en la que iba a vivir un aventura extraordinaria con Dios. ¡Estamos salvados por Cristo! Yo no entiendo a un cristiano angustiado. La alegría tiene que ser el exponente de una vida llena de Cristo, tiene que ser esa chispa que brota de una vida de fe. La alegría es una muestra de esperanza»

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miércoles, 13 de abril de 2016

Arismendy Lozada de joven se alejó de Dios, una enfermedad lo hizo pensar, le amenazaron de muerte las FARC y hoy es diácono y ayuda a los emigrantes

«Los de las FARC y los paramilitares me amenazaban porque les pedí que abandonaran las violaciones de los derechos humanos, porque la vida humana es la más importante, sea cual sea el contexto. Ya un día me dijeron: ‘usted es un objetivo militar’. Un día un hombre vino a verme a mi oficina. Estábamos hablando, y de repente, puso una pistola en la mesa y me amedrentó: ‘Usted tiene 72 horas para abandonar el país. Si le encontramos después de eso, usted es un hombre muerto’»