Ser niño en algunas zonas de la República Democrática del Congo (RDC) equivale a ser explotado sexualmente o como combatiente en cualquiera de los bandos enfrentados en una guerra en la que la población civil se lleva la peor parte.
Miles de menores de 18 años no tienen otra alternativa que la prostitución para poder sobrevivir en las minas de diamantes de la RDC, según denuncia la organización Save the Children. Por su parte, Amnistía Internacional (AI) también advierte de la utilización generalizada y sistemática de niños como combatientes por parte de las diferentes facciones en lucha en ese país.
Save the Children informa sobre los miles de pequeños que viven de la prostitución y de la búsqueda de piedras preciosas en las minas de diamantes que rodean la localidad de Mbuji Mayi, capital de la república de Kasai Oriental, en el centro-sur de la RDC, según informó Radio Okapi, la emisora de la misión de la ONU (MONUC).
En profundas galerías o prostituyéndoseEn la mina de diamantes de Matempu, en Bakwa Tshimuna, a 15 kilómetros al suroeste de Mbuji Mayi, cientos de niños trabajan en las profundas galerías y cientos de niñas se dedican a la prostitución.
“Yo llegué aquí a causa del sufrimiento en casa, no había para comer y vine aquí para alimentar a la familia”, declaró a la emisora un niño que lleva dos años en la mina.
“Tengo 14 años y vivo en los dormitorios, donde ejerzo la prostitución. Llegué tras la muerte de mi madre, mi padre no se ocupaba de mí”, explicó una niña..
Para intentar que testimonios como éstos no vuelvan a reproducirse, Save the Children tiene un programa de formación para cien niños salidos de la mina a fin de intentar solucionar su situación, tal como explica Radio Okapi.
Al mismo tiempo, la división provincial de Asuntos Sociales asegura que ya ha comenzado a sensibilizar a los responsables de las minas y de las iglesias para mejorar la situación de los niños.
Testimonios espeluznantes
Por otra parte, Amnistía Internacional denuncia que la RDC registra una de las tasas más altas de niños soldado en todo el mundo. Los testimonios y entrevistas que AI ha obtenido de niños que han conseguido escapar de cualquiera de los bandos enfrentados son espeluznantes.
Tras siete años de conflicto casi interrumpido en la República Democrática del Congo más de tres millones de personas han muerto sólo desde 1998, la mayoría de ellos hombres, mujeres y niños civiles.
El conflicto también se ha visto contaminado por la utilización generalizada y sistemática de niños como combatientes por parte de todas las facciones en lucha, según publica
MundoSolidario,org, en referencia a un informe de AI.
Estos menores suelen recibir un trato violento durante su entrenamiento y en algunos campos se han registrado muertes de niños debido a las deplorables condiciones en que vivían. A menudo se les envía a las líneas de combate, donde se les obliga a ir en avanzadilla para detectar la presencia de tropas enemigas, hacer de guardaespaldas de sus jefes militares, o se les convierte en esclavos sexuales.
Se utiliza asimismo tanto a niños como a niñas para transportar los pertrechos, el agua y los alimentos, o como cocineros. A algunos se les ha obligado a matar a miembros de sus propias familias, y a otros a participar en actos sexuales y de canibalismo con los cadáveres de los enemigos muertos en los combates. A menudo se les administran drogas y alcohol para contener su emotividad cuando cometen estos crímenes.
En muchos casos, la falta de alternativas de los ex combatientes los ha devuelto rápidamente al conflicto armado o a caer en la prostitución, los delitos menores, el alcohol o las drogas, en una nueva búsqueda de protección y sustento.
A los involucrados en el conflictoEl informe de AI advierte de que es deber del gobierno de transición y unidad nacional de la República Democrática del Congo, de los dirigentes de los grupos armados y las milicias no representados en ese gobierno, así como de los gobiernos extranjeros involucrados en el conflicto, dar órdenes estrictas a las tropas que se encuentran bajo su mando para garantizar que se pone fin inmediatamente al reclutamiento, la formación y la utilización de menores de 18 años como combatientes.
Para poder abordar la cuestión de la impunidad de los responsables de estas prácticas ha de ponerse a disposición de la justicia a los sospechosos de reclutar y utilizar a niños soldados.
Como crímenes de guerra que son, el reclutamiento y la utilización de niños soldados constituyen delitos contra el conjunto de la comunidad internacional, no sólo contra los niños de la República Democrática del Congo y, por consiguiente, la comunidad internacional tiene la responsabilidad jurídica de ayudar al gobierno de transición del país a reforzar su sistema judicial y poner a sus autores a disposición de la justicia.
Además de la abolición legal del reclutamiento y la utilización de menores en los conflictos armados, deben ponerse en marcha iniciativas encaminadas al desarrollo económico y la consolidación de la paz, con el fin de establecer programas sostenibles de desmovilización y rehabilitación.
Los años que los niños de la República Democrática del Congo han pasado en las fuerzas armadas, formándose sobre todo en el arte de la violencia, dejarán un legado que, de no abordarse debidamente, tendrá un efecto pertinaz en el país y en sus ciudadanos
----------------------------------------------------------------Fuente: Forum Libertas-------------------------------------------------------Documentos y artículos relacionados:
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