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jueves, 10 de octubre de 2024

Colin Smith era protestante y se convirtió al catolicismo: «Escribí centenares de cartas a mi familia para explicarles la fe y todos se han hecho católicos. He quedado asombrado por la Providencia»

La búsqueda de la verdad de Colin Smith, el primero por la derecha, ha llevado a la conversión de toda su familia que entraron en la Iglesia Católica la pasada Solemnidad de la Asunción, el 15 de agosto, en la casa madre de las hermanas dominicas de Nashville donde está tomada la imagen. De izquierda a derecha están los hermanos de Colin, Andrew y Abby, y sus padres, Beth y Byron, junto a él - Foto: Colin Smith

* «La razón más obvia de escribir las cartas fue mi amor por mi familia y un deseo genuino de que encontraran la plenitud de la vida cristiana que yo creía haber encontrado. Aunque, escribí concretamente cartas porque no quería darles lecciones. Explicar la posición católica frente al protestantismo lleva mucho tiempo, y dar lecciones sería incómodo. Las cartas añaden un toque personal, que sabía que sería bien recibido. Me había ganado la reputación de ser sólido en mi fe. Fue una experiencia maravillosa, pero también me sentí tentado a considerarlo un logro mío, lo cual no fue así. Las cartas no provocaron la conversión. Los factores más importantes estaban totalmente fuera de mi control. Fue un honor ser el padrino de mi padre y de mi hermano. Tuvimos a muchos de nuestros amigos católicos presentes, lo que fue una gran alegría»

Camino Católico.- Colin Smith es un estudiante de la universidad católica de Notre Dame (Indiana, EE.UU) que se convirtió hace apenas cuatro años. Tiempo en el que no se quedó quieto y escribió cientos de cartas para convencer a su familia de que hicieran lo mismo, y funcionó. El portal National Catholic Register acaba de recoger su historia. "¡Me faltan las palabras! Ha sido surrealista ver cómo nuestra historia se hacía pública y la compartían tantos católicos", publicó Smith recientemente en X. El joven se crió como un protestante evangélico devoto, hasta que se convirtió al catolicismo antes de comenzar su primer año de universidad en Notre Dame.

Después de su conversión, Smith decidió escribir cientos de cartas a sus padres y a sus dos hermanos menores explicándoles el razonamiento teológico de su fe. Cuatro años después, sus padres, Beth y Byron, y sus hermanos, Abby y Andrew, ingresaron a la Iglesia Católica el 15 de agosto, Solemnidad de la Asunción de María, en la casa madre de las Hermanas Dominicas de Santa Cecilia en Nashville, Tennessee.

Smith ha explicado cómo la búsqueda de la verdad en medio de una cultura secular y progresista atrajo a sus padres y hermanos a la Iglesia. El estudiante ha compartido la inspiración que había detrás de los cientos de cartas que escribió a los miembros de su familia.

"A principios de la escuela secundaria, me enfrenté a las preguntas típicas de esa edad: ¿Dios realmente existe? ¿tiene sentido la resurrección? ¿La Biblia es verdad? Decidí examinar los principios básicos de la religión y experimenté un intenso entumecimiento espiritual. Hasta que sentí a Dios nuevamente cuando los sacerdotes y las hermanas dominicas entraron en mi vida, especialmente el padre Dominic Legge. Él visitaba nuestra casa para cenar y siempre me sorprendía lo razonable que hacía parecer el cristianismo", comenta Smith.

"Las cartas no provocaron la conversión. Los factores más importantes estaban totalmente fuera de mi control. Fue un honor ser el padrino de mi padre (momento de la imagen) y de mi hermano", dice Colin - Foto: Colin Smith

"Me presentó a Santo Tomás de Aquino y al tomismo, especialmente al Instituto Thomista, que él dirigía, y a Pints ​​with Aquinas, un podcast presentado por Matt Fradd. Profundizar en la Summa Theologica hubiera sido demasiado, pero estos resúmenes me ayudaron a conocer su pensamiento. Con el tiempo, comencé a leer los escritos de Santo Tomás, y ​​estas fuentes me convencieron de la fe cristiana. Me impresionó la cantidad de excelentes preguntas que planteaba Santo Tomás, que yo nunca había considerado".

"El estudio del tomismo fue profundamente terapéutico para mí. Cambió totalmente mi forma de ver el mundo y borró gran parte de la basura de la filosofía moderna que había absorbido a través de la cultura. Decidí que, como honestidad intelectual, debía darle al catolicismo una oportunidad de persuadirme. Cuando me sumergí en la tradición católica, me di cuenta de que había demasiados puntos en discordia, así que decidí centrarme en las cuestiones de autoridad".

"San John Henry Newman finalmente me convenció de las pretensiones de autoridad del catolicismo al resolver mis preguntas sobre por qué los Padres de la Iglesia estaban en desacuerdo sobre muchas cuestiones teológicas. Todo encajaba y me convencí del catolicismo en mi último año de secundaria. Me convertí al catolicismo el verano siguiente, antes de entrar en Notre Dame, en la Casa de Estudios Dominicos".

Sin embargo, paradójicamente, los "enemigos de la Iglesia" tuvieron un papel importante en su conversión y en la de toda su familia: "Años antes de mi propia conversión, mi familia puso a mi hermana en una escuela feminista muy secular. La situación se volvió insostenible. Mi hermana fue castigada por dibujar un árbol de Navidad en la pizarra porque podría ofender a algunos estudiantes. Nuestros padres decidieron entonces enviarla a la Academia Santa Cecilia, la escuela católica para niñas que está al final de la calle, dirigida por las hermanas dominicas. ¡A través de esta escuela, las hermanas dominicas y los sacerdotes de la Provincia Oriental entraron en nuestras vidas!".

"Los enemigos de la Iglesia ayudaron a traer a los dominicos a mi vida y a la de mi familia. Gracias a las payasadas de una escuela progresista mi familia conoció a los dominicos y el padre Dominic Legge se convirtió en mi mentor".

Sobre cómo percibió su familia su conversión, Colin explica que fue difícil. "Aunque nunca me desincentivaron a no hacerlo. Mi hermana había asistido a la Academia Santa Cecilia, y estaba más familiarizada con la fe que el resto. Aun así, todos asistieron a mi confirmación, que me pareció una muestra impactante de amor y de apoyo", cuenta.

"Los enemigos de la Iglesia ayudaron a traer a los dominicos a mi vida y a la de mi familia", dice Colin Smith

Y, entonces, Colin decidió escribirles cartas. "La razón más obvia de hacerlo fue mi amor por mi familia y un deseo genuino de que encontraran la plenitud de la vida cristiana que yo creía haber encontrado. Aunque, escribí concretamente cartas porque no quería darles lecciones. Explicar la posición católica frente al protestantismo lleva mucho tiempo, y dar lecciones sería incómodo. Las cartas añaden un toque personal, que sabía que sería bien recibido. Me había ganado la reputación de ser sólido en mi fe. Algunos miembros de la familia consideraban que podía ser un defecto, pues creían que había sido a expensas del corazón. Las cartas eran una excelente manera de demostrar amor, el atractivo emocional de la fe y proporcionar argumentos intelectuales".

"Cuando escribí estas cartas, ya conocía bastante bien la mayoría de los argumentos católicos. Sin embargo, The Fathers Know Best fue un excelente libro que consulté durante todo el proceso para encontrar las referencias rápidas a los Padres de la Iglesia que quería citar en mis cartas".

Además de las cartas, hubo lugares que tocaron especialmente a sus familiares. Roma, por ejemplo, fue un sitio importante en la conversión de su madre. "El lugar que más la impactó fue, sin duda, el Circo de Nerón. Ella y yo habíamos estado hablando mucho sobre la Eucaristía, pero una visita a la Basílica de San Pedro cambió todo. Ella me dijo que su guía le estaba explicando el gobierno de Nerón, cuando se volvió a mi hermano para comentarle que Nerón era un hombre malvado. Pero, el guía defendió a Nerón, argumentando que él nunca odió a los cristianos. Más bien, pensaba que eran "raros" porque se comían a su Dios. Mi madre se quedó perpleja y pidió una aclaración. El guía confirmó que la razón de muchos martirios era la negativa a retractarse de que la Eucaristía es la verdadera carne y sangre de Cristo. Más tarde, tras esta anécdota, empezó a aceptar la Presencia Real".

Ver a los miembros de su familia crecer en la fe, ha sido para Colin todo un regalo. "Fue algo extraordinario. Es fácil imaginar un movimiento gradual hacia la conversión, sin embargo, a veces, parecía que se estaban deshaciendo los avances. No pude ver lo que estaba sucediendo hasta casi el final del proceso. Una vez que me di cuenta de lo que había sucedido, quedé asombrado por la Providencia".

"Fue una experiencia maravillosa, pero también me sentí tentado a considerarlo un logro mío, lo cual no fue así. Las cartas no provocaron la conversión. Los factores más importantes estaban totalmente fuera de mi control. Fue un honor ser el padrino de mi padre y de mi hermano. Tuvimos a muchos de nuestros amigos católicos presentes, lo que fue una gran alegría", concluye Colin Smith.

Denise Burciaga, 32 años: «Me alejé de la fe, me encontré hundida, me sentía muy sola. comencé a ir a las eucaristías de la Comunidad Neocatecumenal y Dios me ha llamado a ser monja clarisa»

"Nunca había conocido un convento, no era muy religiosa, no conocía bien el Catecismo, y mucho menos de la vida de los santos", cuenta Denise Burciaga, que acaba de tomar el hábito y ya es sor María

* «Con la gracia de Dios ya no sentía soledad, comencé a sentirme feliz, mi familia se fue restaurando y acercando a Dios, mi vida tenía de nuevo dignidad. A los 30 años pedí hacer una experiencia porque ya me sentía lista para dar un paso en la búsqueda de mi vocación, pero nunca pensé en ser monja y mucho menos de clausura, y menos aún lejos de mi familia y comunidad. Yo quería seguir a Dios, pero en una vida que ya conocía. Tenía mucho miedo, muchas dudas, no quería dejar mi país, mi familia, mi comunidad. Estaba contenta con todo lo que tenía en casa. Pero la llamada de Dios es muy fuerte y, aunque tenía miedo, también me sentía muy amada»

Camino Católico.- Hoy es sor María Jerusalén de Cristo Crucificado, O.S.C., pero, hasta hace muy poco, todos la conocían como Denise Burciaga. Con 32 años, nacida en San Diego, California (EE.UU), del Camino Neocatecumenal, tercera de tres hermanos y padres mexicanos, acaba de tomar el hábito como monja clarisa en el Real Monasterio de Santa Clara de Allariz, un pueblo de Orense (Galicia, España) de unos 6000 habitantes.

La entrevista Juan Cadarso en Religión en Libertad y la conversación testimonial sor María cuenta cómo una californiana, un día, decide abandonar el envidiado "estado dorado", sus maravillosas playas, el surf, los impresionantes parques de atracciones o las taquerías, tan comunes por toda esa zona del país, para hacerse monja de una orden con 800 años de historia (casi cuatro veces más que los que tiene EE.UU), en un lugar remoto como España, al otro lado del "charco". 

Aquella peregrinación a Roma

"Yo estudié en San Diego State University y saqué mi carrera en Comunicación, pero al no encontrar un trabajo que me satisficiera, fui buscando otros trabajos. Los últimos dos años antes de venir al convento trabajé como administradora en clínicas de dentista y me gustó mucho", comenta Sor María.

Así como se alejó de la comunicación, también lo hizo, poco a poco, de la fe. "Aunque en mi familia éramos católicos, no practicábamos mucho nuestra fe. De pequeña íbamos a misa los domingos y ayudábamos en unos grupos de la parroquia, pero yo lo fui dejando", relata. Hasta que con 26 años, en una peregrinación, se cruzó Dios con ella, por medio del Camino Neocatecumenal. 

Denise Burciaga estudió Comunicación en la San Diego State University

"Mi tía y mi madre fueron las primeras en entrar en una comunidad; me invitaron a ir, pero solo fui a las primeras catequesis y no regresé, porque no parecía que fuera para mí. Después de hacer mi vida me encontré hundida, ya no sabía qué hacer, me sentía muy sola. En este tiempo comencé a ir a las eucaristías de la Comunidad Neocatecumenal, y después de una peregrinación a Roma decidí entrar a una comunidad", recuerda.

Con el paso del tiempo, la joven Denise empezaría a descubrir el regalo de la fe. "Con el tiempo, con los pasos dados en el Camino, con la ayuda de mi comunidad y de mis catequistas fui conociendo lo que es la verdadera Iglesia, y comencé a sentirme amada por Dios y mucho más perdonada de todos mis pecados. Vi que a Dios no le importaba que me hubiera apartado de él, sino que hubiera regresado, que Él siempre estaba esperando mi regreso. Conocí su amor misericordioso y así fue cambiando mi vida".

"Con la gracia de Dios ya no sentía soledad, comencé a sentirme feliz, mi familia se fue restaurando y acercando a Dios, mi vida tenía de nuevo dignidad. A los 30 años pedí hacer una experiencia porque ya me sentía lista para dar un paso en la búsqueda de mi vocación, pero nunca pensé en ser monja y mucho menos de clausura, y menos aún lejos de mi familia y comunidad", añade sor María.

"Después de hacer mi vida me encontré hundida, ya no sabía qué hacer, me sentía muy sola", dice Denise Burciaga

Pero, fueron sus catequistas del Camino, que son españoles y que conocían a la madre superiora sor María Ángel, los que le preguntaron si quería venir a hacer una experiencia a este Monasterio de Santa Clara de Allariz. "Les dije que sí, porque al ver fotos por Internet, vi que Allariz era muy bonito y podía ser una buena ocasión para conocer el pueblo y aprovechar el viaje porque me encantaba viajar. Hice una experiencia de tres semanas en septiembre de 2022 y en esa experiencia comenzó a cambiar mi vida otra vez".

Una nueva vida que, esta vez, podía llevarle a vivir lejos de su familia, amigos, comunidad... y que supondría un choque bastante grande, ya que desconocía casi todo de ella. "Nunca había conocido un convento, no era muy religiosa, no conocía bien el Catecismo, y mucho menos de la vida de los santos. Tampoco conocía quién era San Francisco y Santa Clara hasta que llegué aquí", comenta la monja clarisa.

Volvió a San Diego, pero nada era igual. "Al llegar a casa me sentía extraña, echaba mucho de menos a todas las hermanas, y algo en mí me decía que ya no podía vivir igual. Pasaba el tiempo y continuaban estos mismos sentimientos. Hablé con mis catequistas y decidimos que sería mejor hacer una experiencia más larga, de tres meses. Regresé al convento en diciembre, y estuve hasta mediados de marzo de 2023. Regresé a mi casa y seguía resistiéndome mucho a la vocación, pero Dios me la iba confirmando de muchas maneras".

Seguir a Dios, pero "más convencional"

Aunque, de primeras, le hubiera gustado que los planes de Dios fueran más convencionales. "Yo quería seguir a Dios, pero en una vida que ya conocía. Tenía mucho miedo, muchas dudas, no quería dejar mi país, mi familia, mi comunidad. Estaba contenta con todo lo que tenía en casa. Pero la llamada de Dios es muy fuerte y, aunque tenía miedo, también me sentía muy amada", afirma sor María.

En una peregrinación, se cruzó Dios con Denise Burciaga, por medio del Camino Neocatecumenal y le ha llevado a entregarse como monja Clarisa

"Me costó mucho decírselo a mis padres, ya que no conocíamos casi nada de la vida de clausura, y sabía que les iba asombrar. No entendían por qué una vida tan radical, tan lejos, y por qué yo, que no soy especialmente religiosa. Les costó aceptar, pero me apoyaron, algo que para mí fue una confirmación de Dios y un gran milagro. Juntos, mi familia y yo, estamos aceptando la voluntad de Dios", añade.

Hasta que esa incipiente vocación fue madurando y Denise decidió hacerse clarisa. El pasado domingo 29 de septiembre, después de la Eucaristía dominical, tomó el habito en el Real Monasterio de Santa Clara de Allariz, rodeada de sus 20 hermanas y de los vecinos del pueblo, aunque, no solo de ellos. "Otro milagro fue que toda mi familia, y mis sobrinas, mi prima, y algunos de mi comunidad pudieron celebrar este gran día conmigo. Desde la primera experiencia, el Señor no ha dejado de mostrarme su amor, a mí y a mi familia, y sigue confirmándome la vocación. Estoy muy agradecida por la vocación, aunque no me la merezco, pero Dios es mucho más grande y su amor nunca se acaba".

"Pensaba que venir a Allariz y dejar mi familia suponía separarme de ellos, y, al contrario, los siento muy cerca y los quiero más aún; y a ellos les pasa lo mismo. Ahora vivo en paz, mi vida tiene sentido y estoy contenta", asegura.

Dios da la fuerza para todo

La charla con sor Maria va llegando a su fin pero, antes, quiere dejar un mensaje. "Yo les diría a las jóvenes de hoy que no se dejen vencer por el miedo, la soledad, angustia, las cosas materiales, o cualquier otra cosa. Y si tiene esos sentimientos, no se preocupen, que Dios te da la fuerza para vencer todo. Que tengan un corazón abierto y él te ayudará. Él te está esperando, a Él no le importa que vida llevas o has vivido. Para las que piensan que Dios no las ama o es muy tarde para acercarse a Él, están equivocadas. Dios nos ama con locura sin importar lo que hemos o no hemos hecho. Y para las que ya desean acercarse a Dios, pero se las hace imposible, no tengan miedo, vale la pena dar el paso. El amor que Dios nos quiere dar a cada uno de nosotros es mucho más grande de lo que podamos imaginar", asegura.


"Él te está esperando, a Él no le importa que vida llevas o has vivido", dice Denise Burciaga a los jóvenes

La monja clarisa de origen californiano no puede terminar sin dar las gracias por esta nueva vida que acaba de comenzar. "Le doy muchas gracias a Dios por cambiar mi vida y poder ser sinceramente feliz, que es lo que quiere para cada uno de nosotros. Este nuevo paso es una acción de gracias por todo lo que ha hecho por mí y para gloria de Dios. Ahora pido poder ser fiel y perseverar hasta el fin".

Conoce más sobre las clarisas de Allariz en este enlace.

San Daniel Comboni - Película de su vida en dibujos animados

 


Camino Católico.-  Conoce la apasionante vida de San Daniel Comboni a través de dibujos animados. Descubre quién fue el fundador de los Misioneros Combonianos y por qué fue proclamado santo por el Papa Juan Pablo II.


Misterios Luminosos del Santo Rosario desde el Santuario de Lourdes, 10-10-2024


10 de octubre de 2024.- (
Camino Católico).- Rezo de los Misterios Luminosos del Santo Rosario, correspondientes a hoy jueves, desde la Gruta de Massabielle, en el Santuario de Lourdes, en el que se intercede por el mundo entero.

Homilía del P. Heliodoro Mira y lecturas de la Misa de hoy, jueves, Santo Tomás de Villanueva, 10-10-2024


10 de octubre de 2024.- (Camino Católico) Homilía del P. Heliodoro Mira y lecturas de la Santa Misa de hoy, jueves de la 27ª semana de Tiempo Ordinario, Santo Tomás de Villanueva, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.


Santa Misa de hoy, jueves, Santo Tomás de Villanueva, 10-10-2024

10 de octubre de 2024.- (Camino Católico) Celebración de la Santa Misa de hoy, jueves de la 27ª semana de Tiempo Ordinario, Santo Tomás de Villanueva, presidida por el P. Heliodoro Mira, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.

Palabra de Vida 10/10/2024: «Pedid y se os dará» / Por P. Jesús Higueras

Camino Católico.- Espacio «Palabra de Vida» de 13 TV del 10 de octubre de 2024, jueves de la 27ª semana de Tiempo Ordinario, presentado por el padre Jesús Higueras en el que comenta el evangelio del día.

Evangelio: San Lucas 11, 5-13:

En aquel tiempo, dijo Jesús a los discípulos:

«Suponed que alguno de vosotros tiene un amigo, y viene durante la medianoche y le dice:

«Amigo, préstame tres panes, pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle»; y, desde dentro, aquel le responde:

«No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados; no puedo levantarme para dártelos»; os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por la importunidad se levantará y le dará cuanto necesite.

Pues yo os digo a vosotros: pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque todo el que pide recibe, y el que busca halla, y al que llama se le abre.

¿Qué padre entre vosotros, si su hijo le pide un pez, le dará una serpiente en lugar del pez? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión?

Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?».

Adoración Eucarística con el P. José Aurelio Martín en la Basílica de la Concepción de Madrid, 10-10-2024

10 de octubre de 2024.- (Camino Católico) Adoración al Santísimo Sacramento con el P. José Aurelio Martín Jiménez, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.

Oración a San Daniel Comboni para pedir una fe simple y grande que se abandone a la voluntad de Dios

Camino Católico.-  Cada 10 de octubre la Iglesia Católica celebra a San Daniel Comboni (1831-1881), misionero y fundador de la “Compañía Hijos del Sagrado Corazón de Jesús”, instituto que adoptaría más tarde el nombre de “Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús” en honor a su fundador.

Hace 21 años, el 5 de octubre de 2003, el Papa San Juan Pablo II celebraba la Misa de canonización de este eximio misionero. Durante la homilía el Santo Padre recordaba cuánto “hacen falta evangelizadores que tengan el entusiasmo y el celo apostólico del Obispo Daniel Comboni, apóstol de Cristo entre los africanos”. 

“Él empleó los recursos de su rica personalidad y de su sólida espiritualidad para dar a conocer a Cristo y hacer que fuera acogido en África, continente que amaba profundamente”, añadió el Pontífice.

San Daniel Comboni nació en Limone sul Garda, Brescia (Italia), en 1831, en el seno de una humilde familia de campesinos. Inició sus estudios en Verona, en el Colegio San Carlo, y luego pasó al Instituto fundado por el Padre Nicolás Mazza. Allí estudió filosofía y teología, y fue allí también donde empezó a interesarse por las misiones en el África Central. 

Fue ordenado sacerdote en 1854 y unos años después, lleno del espíritu misionero que Dios suscitó en él, partió rumbo a África. Ahí encontró una realidad caracterizada por la pobreza material y la miseria espiritual, con gentes que no conocían a Dios y que al mismo tiempo carecían de las condiciones básicas para vivir dignamente. 

Comboni, de regreso en Italia, decidió ayudar a esos hijos de Dios por los que parecía que nadie estaba dispuesto a hacer algo. Como respuesta a tan grande necesidad, empezó a pedir recursos para la misión africana, primero viajando por distintos lugares de Europa y luego, incluso, pidiendo ayuda entre los obispos asistentes al Concilio Vaticano I, evento en el que participó. 

Daniel Comboni fue el fundador de dos institutos misioneros, uno de varones y otro de mujeres: los Misioneros Combonianos y las Hermanas Combonianas. Posteriormente, sería nombrado Vicario Apostólico de África Central y consagrado obispo en 1877.

Mons. Comboni, al lado de sus hermanos africanos, pasó innumerables peripecias y dificultades: la muerte de varios de sus misioneros, la enfermedad, las crueles sequías, el hambre y el asedio de esclavistas modernos. Por último, sus enemigos lanzaron sobre él todo tipo de falsas acusaciones, las que el obispo enfrentó con paciencia y caridad. 

Con todo, Mons. Comboni se mantuvo firme, fiel a la Cruz de Cristo y a su Iglesia. Mientras la salud lo acompañó, trabajó en pos de la consolidación de la actividad misionera en el África Central. Murió el 10 de octubre de 1881.

Actualmente, los combonianos trabajan en diversas obras misioneras alrededor del mundo y su presencia en África se mantiene incluso en zonas de conflicto, o donde los cristianos sufren persecución.

Por otro lado, los combonianos han calado en el alma y la cultura popular católica de varias generaciones a través de sus ágiles publicaciones: “Aguiluchos” y “Misión sin fronteras”, revistas con las que dan a conocer la labor misionera en el mundo de hoy.

Con la siguiente oración invoquemos la intercesión de San Daniel Comboni para pedir una fe simple y grande que se abandone a la voluntad de Dios:


Oración a San Daniel Comboni para pedir una fe simple y grande que se abandone a la voluntad de Dios

Oh, Padre Todopoderoso,

San Daniel Comboni vivió una admirable e infinita confianza en Ti: danos también a nosotros, por su intercesión una fe simple y grande que cada día se abandone a tu voluntad.

Oh, Padre, El espíritu de sacrificio y el amor heroico de la Cruz ardían en el corazón de San Daniel Comboni: danos también a nosotros un corazón generoso como el suyo, que sabe entregarse en el sacrificio sin cansarse.

Oh, Padre, San Daniel Comboni tenía un amor inmenso por las almas de los más pobres y abandonados: haz que como él, no descansemos si hay algún hermano que todavía no te conoció, haznos misioneros del Evangelio para que muchos te puedan encontrar.

Oh, Padre, San Daniel Comboni pasó toda su vida difundiendo Tu Reino entre los pueblos del África; amó intensamente el África y los africanos; por su intercesión da a los pueblos africanos el pan del Evangelio y sostén a los misionarios en ese continente.

¡San Daniel Comboni, ruega por nosotros!

El amor de Dios hay que experimentarlo, acércate a Él con respeto, no te juzga, Su misericordia es eterna / Por P. Carlos García Malo

 


Oremos con perseverancia por Inés, una niña que está ingresada en la UCI a la espera de una operación de corazón. ¡Gracias por vuestras oraciones!