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jueves, 5 de diciembre de 2024

Emma Córdova, artista católica: «Decidí arriesgar todo para comunicar lo que Jesús y María colocan en mi corazón. Esto recobró para mí el sentido de mi existencia»


Emma Córdova Reto y sus obras de arte: Pinturas de la Virgen Fátima y los tres pastorcitos, junto a otra de Carlo Acutis. | Foto: Cortesía de Emma Córdova

* «Mi intención de crear surge del contacto con la oración con Dios Padre, de la práctica de mi fe y con una mirada optimista de la vida y la realidad. La práctica de los sacramentos, la oración, la visita al Santísimo y las obras de misericordia han sido determinantes para mi obra. Esto me permite articular mi vida personal con la profesional»

Camino Católico.- “Comunico lo que Jesús y María colocan en mi corazón”, asegura Emma Córdova Reto, una artista católica cuya vida y arte están profundamente entrelazados con su fe. Para ella, el arte no es sólo una técnica, sino un vehículo para expresar su relación con Dios y un don al servicio de la evangelización.

Emma es peruana, originaria de la provincia de Sullana, departamento de Piura, y tiene 34 años. Es artista plástica y profesora de inglés. Es conocida en redes sociales por elaborar pinturas de Jesús, María y los santos de estilo naíf, un enfoque artístico caracterizado por su sencillez y colores vivos.

Obras de arte de Emma Córdova. Representaciones Cristo, la Virgen Marúa y los santos / Foto: Cortesía de Emma Córdova

En una entrevista con ACI Prensa comparte su camino personal y creativo, así como su misión de evangelizar a través de sus obras.

Una hija de Dios llamada al arte

Emma se describe a sí misma con orgullo como “una hija de Dios, a quien Jesús llamó por mi nombre, con mis defectos y virtudes”. 

Pintura del beato Carlo Acutis de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

Desde pequeña, su amor por el dibujo y la pintura floreció, inspirado por su familia. “Mi hermano y yo solíamos pasar varias horas pintando y dibujando animes que veíamos en la tele”, recuerda. Este talento fue el inicio de una pasión que más tarde perfeccionaría en la escuela de arte bajo la guía del maestro Jack Pozo.

Sin embargo, su verdadera transformación ocurrió cuando decidió consagrar su talento a Dios. Tras trabajar durante más de 12 años como profesora de inglés, Emma llegó a un punto de inflexión. “Sentía que todo se había vuelto monótono. Me dolía pensar que había dejado olvidado mi arte”, confiesa. 

Pintura del Señor de los Milagros de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

Este momento de insatisfacción se convirtió en un llamado: “Decidí arriesgar todo para comunicar lo que Jesús y María colocan en mi corazón. Esto recobró para mí el sentido de mi existencia”.

La fe, el arte y la evangelización

Emma comparte que su vida espiritual es la fuente de su inspiración artística. “La práctica de los sacramentos, la oración, la visita al Santísimo y las obras de misericordia han sido determinantes para mi obra. Esto me permite articular mi vida personal con la profesional”.

A través de su arte, ella busca transmitir mensajes de fe y esperanza, combinando su estilo naíf con elementos simbólicos que evocan la dulzura y pureza de la vida en santidad.

Pintura de Santa Rosa de Lima de Emma Córdova /  Foto: Cortesía de Emma Córdova

“Mi propuesta tiene una responsabilidad: poner mi talento al servicio del que me lo dio”, dice con humildad. Sus obras representan a Jesús, María y los santos, resaltando valores como la paz, la alegría y la grandeza de vivir conforme al Evangelio.

Además, integra una dimensión ambientalista en algunas de sus creaciones, reflexionando sobre la creación de Dios a través de formas orgánicas y colores esenciales. “Es una alegoría a la vida que reconoce y agradece a Dios Creador por mantener el ciclo vital”.

Obra de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

El proceso detrás de cada obra

El proceso creativo de Emma está profundamente influenciado por su vida espiritual, las experiencias y su entorno. “Mi intención de crear surge del contacto con la oración con Dios Padre, de la práctica de mi fe y con una mirada optimista de la vida y la realidad”, explica. Su trabajo incluye bocetos iniciales que luego toma para desarrollar en soportes como lienzos, utilizando óleo o técnicas mixtas como acuarelas, grafito y tinta.

Virgen de Fátima y los tres pastorcitos de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

Cada obra tiene un tiempo único de gestación. “No es una fábrica de pinturas”, aclara. “Regularmente realizo dos o tres obras al mes, pero depende de las inquietudes que sienta en ese momento”. Para Emma, cada pieza es única, un reflejo de su pensamiento y sentimiento: “Cada pieza que realizo es una obra original que no se repite necesariamente”.

Pintura del Padre Pío de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

Los desafíos y sueños de Emma

Emma reconoce que ser artista católica en Perú tiene sus retos, especialmente en un mercado que aún no valora plenamente el arte sacro. “Es difícil posicionar obras en función de la fe, pero soy optimista. Se están dando pasos importantes a través de movimientos religiosos y eventos católicos”, asegura.

Más allá de la comercialización, su mayor anhelo es despertar en las personas “una genuina curiosidad y el deseo de unirse a la verdad”, acercándolas a Dios a través de la belleza de sus obras. También espera posicionar su arte como un referente tanto en el estilo religioso como en el ambientalista.

Emma Córdova durante una feria vocacional católica en 2024 / Foto: Cortesía de Emma Córdova

“En una feria, presenté mis obras religiosas y pude observar cómo muchas personas se entusiasmaban al ver santitos pintados al óleo de manera dulce en formatos pequeños, algo quizá poco común, lo cual les enternecía profundamente”. 

“También noté cómo miembros de distintas congregaciones religiosas se identificaban con algunos santos que representaban sus carismas, como los franciscanos, dominicos y carmelitas. Todo esto me lleva a reflexionar que la intención de evangelizar por medio del arte realmente está teniendo un efecto en las personas”, relata.

Pintura de Cristo Rey de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

Un mensaje para quienes buscan su propósito

Inspirada por el pasaje de Jeremías 1:5: “antes de formarte en el vientre de tu madre te conocí; antes que salieras del seno te consagré; como profeta de las gentes te constituí”; Emma invita a otros a no posponer los sueños que Dios ha sembrado en sus corazones.

“Él sabe lo que puedes hacer y nos necesita más que nunca en estos tiempos difíciles. No dejes pasar mucho tiempo antes de iniciar lo que Dios ha sembrado en sus corazones, lo que Él ha depositado a través de su Espíritu Santo”.


Obras de Emma Córdova / Foto: Cortesía de Emma Córdova

“Hay un inmensa necesidad de comunicar a los demás el amor infinito y misericordioso de Dios, y nosotros actuamos como su instrumento, llamados a darlo a conocer de diversas formas creativas, novedosas, sólo hay que abandonarse a Él, practicando la fe verdaderamente y creo que solo así escucharemos con atención lo que él quiere de nosotros y nos mostrará el camino a seguir”, concluye.

Puedes seguir a Emma en su cuenta de Instagram: https://goo.su/KqU59. También puede seguirla en su cuenta de Facebook: https://goo.su/nDU1ol.

Homilía y lecturas de la Misa de hoy, jueves de la 1ª semana de Adviento, 5-12-2024

5 de diciembre de 2024.- (Camino Católico) Homilía y lecturas de la Santa Misa de hoy, jueves de la 1ª semana de Adviento, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid. 

Santa Misa de hoy, jueves de la 1ª semana de Adviento, 5-12-2024

5 de diciembre de 2024.- (Camino Católico) Celebración de la Santa Misa de hoy, jueves de la 1ª semana de Adviento, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.

Misterios Luminosos del Santo Rosario desde el Santuario de Lourdes, 5-12-2024


5 de diciembre de 2024.- (Camino Católico).- Rezo de los Misterios Luminosos del Santo Rosario, correspondientes a hoy jueves, desde la Gruta de Massabielle, en el Santuario de Lourdes, en el que se intercede por el mundo entero.


Palabra de Vida 5/12/2024: «El que hace la voluntad del Padre entrará en el reino de los cielos» / Por P. Jesús Higueras

Camino Católico.- Espacio «Palabra de Vida» de 13 TV del 5 de diciembre de 2024, jueves de la 1ª semana de Adviento, presentado por el padre Jesús Higueras en el que comenta el evangelio del día.

Evangelio: San Mateo 7, 21.24-27:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«No todo el que me dice «Señor, Señor» entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió, porque estaba cimentada sobre roca.

El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se desbordaron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se derrumbó. Y su ruina fue grande».

El Adviento es un llamado a cambiar la mirada y a limpiar nuestro corazón y fortalecer nuestra relación con Dios / Por P. Carlos García Malo

 


miércoles, 4 de diciembre de 2024

Papa Francisco en la Audiencia, 4-12-2024: «Predicar con la unción del Espíritu Santo significa transmitir, junto con ideas y doctrina, vida y convicción de nuestra fe»

 


* «Es fácil decirlo -se podría objetar-, pero ¿cómo ponerlo en práctica si no depende de nosotros, sino de la venida del Espíritu Santo? En realidad, hay una cosa que depende de nosotros, o más bien dos, y las mencionaré brevemente. La primera es la oración. El Espíritu Santo viene sobre los que rezan, porque el Padre celestial -está escrito- ‘da el Espíritu Santo a los que se lo piden’ (Lc 11,13), ¡sobre todo si se lo piden para anunciar el Evangelio de su Hijo! ¡Cuidado con predicar sin rezar! Uno se convierte en lo que el Apóstol llama ‘bronces que resuenan y címbalos que retiñen’ (cf. 1 Co 13:1). Lo segundo es no querer predicarnos a nosotros mismos, sino a Jesús el Señor»

Video completo de la transmisión en directo realizada por Vatican News de la catequesis traducida al español y de la síntesis que el Papa ha hecho en nuestro idioma

 * «¡Y por favor, sigamos orando por la paz! La guerra es una derrota humana. La guerra no resuelve los problemas, la guerra es mala, la guerra destruye. Oremos por los países en guerra. No olvidemos a la atormentada Ucrania, no olvidemos a Palestina, Israel, Myanmar... ¡Tantos niños muertos, tantos inocentes muertos! Oremos para que el Señor nos traiga la paz. Siempre oremos por la paz»

4 de diciembre de 2024.- (Camino Católico)  “Predicar con la unción del Espíritu Santo significa transmitir, junto con ideas y doctrina, vida y convicción de nuestra fe” ha dicho el Papa Francisco en la audiencia general, en la plaza de San Pedro. En su catequesis ha hablado del papel del Espíritu Santo en la predicación de la Iglesia y ha recomendado a los predicadores que la homilía sea breve, con “una idea, un afecto y una invitación a hacer”.

Al final de la audiencia general, el Papa ha vuelto a pedir rezar por la paz en los países afectados por conflictos. «La guerra es una derrota humana», afirma. En el vídeo de Vatican News se visualiza y escucha la catequesis traducida al español y la síntesis que el Santo Padre ha hecho en nuestro idioma, cuyo texto completo es el siguiente:


PAPA FRANCISCO

AUDIENCIA GENERAL

Plaza de San Pedro

Miércoles, 4 de diciembre de 2024

Catequesis. El Espíritu y la Esposa. El Espíritu Santo guía al Pueblo de Dios al encuentro con Jesús, nuestra esperanza

16. Anunciar el Evangelio en el Espíritu Santo. El Espíritu Santo y la evangelización

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!

Después de haber reflexionado sobre la acción santificadora y carismática del Espíritu, dedicamos esta catequesis a otro aspecto: la obra evangelizadora del Espíritu Santo, es decir, su papel en la predicación de la Iglesia.

La Primera Carta de Pedro define a los apóstoles como «los que anunciaron el Evangelio por medio del Espíritu Santo» (cf. 1,12). En esta expresión encontramos los dos elementos constitutivos de la predicación cristiana: su contenido, que es el Evangelio, y su medio, que es el Espíritu Santo. Digamos algo del uno y del otro.

En el Nuevo Testamento, la palabra «Evangelio» tiene dos significados principales. Puede referirse a cualquiera de los cuatro Evangelios canónicos: Mateo, Marcos, Lucas y Juan; en esta acepción, «Evangelio» significa la buena nueva proclamada por Jesús durante su vida terrenal. Después de Pascua, la palabra «Evangelio» adquiere el nuevo significado de buena noticia sobre Jesús, es decir, el misterio pascual de la muerte y resurrección del Señor. Esto es lo que el apóstol llama «Evangelio» cuando escribe: «No me avergüenzo del Evangelio, porque es poder de Dios para la salvación de todo el que cree» (Rom 1:16).

La predicación de Jesús, y, más tarde, la de los apóstoles, también contiene todos los deberes morales que se desprenden del Evangelio, empezando por los Diez Mandamientos y terminando por el 'nuevo' mandamiento del amor. Pero si no queremos volver a caer en el error denunciado por el apóstol Pablo de anteponer la ley a la gracia y las obras a la fe, debemos partir siempre del anuncio de lo que Cristo ha hecho por nosotros. Por eso, en la exhortación apostólica Evangelii gaudium se insiste tanto en la primera de las dos cosas, es decir, en el kerygma o «anuncio», del que depende toda aplicación moral.

De hecho, «en la catequesis tiene un papel fundamental el primer anuncio o “kerygma”, que debe ocupar el centro de la actividad evangelizadora y de todo intento de renovación eclesial. […] Cuando a este primer anuncio se le llama “primero”, eso no significa que está al comienzo y después se olvida o se reemplaza por otros contenidos que lo superan. Es el primero en un sentido cualitativo, porque es el anuncio principal, ese que siempre hay que volver a escuchar de diversas maneras y ese que siempre hay que volver a anunciar de una forma o de otra a lo largo de la catequesis, en todas sus etapas y momentos. […] No hay que pensar que en la catequesis el kerygma es abandonado en favor de una formación supuestamente más «sólida». Nada hay más sólido, más profundo, más seguro, más consistente y más sabio que ese anuncio» (nn. 164-165), es decir el del kerygma

    

Hasta ahora hemos visto el contenido de la predicación cristiana. Sin embargo, debemos tener en cuenta también el medio del anuncio. El Evangelio debe predicarse «mediante el Espíritu Santo» (1 Pe 1:12). La Iglesia debe hacer precisamente lo que Jesús dijo al comienzo de su ministerio público: «El Espíritu del Señor está sobre mí; por eso me ha ungido y me ha enviado a llevar la buena nueva a los pobres» (Lc 4, 18). Predicar con la unción del Espíritu Santo significa transmitir, junto con las ideas y la doctrina, la vida y la convicción de nuestra fe. Significa confiar no en «discursos persuasivos de sabiduría, sino en la manifestación del Espíritu y su poder» (1 Cor 2:4), como escribió San Pablo.

Es fácil decirlo -se podría objetar-, pero ¿cómo ponerlo en práctica si no depende de nosotros, sino de la venida del Espíritu Santo? En realidad, hay una cosa que depende de nosotros, o más bien dos, y las mencionaré brevemente. La primera es la oración. El Espíritu Santo viene sobre los que rezan, porque el Padre celestial -está escrito- «da el Espíritu Santo a los que se lo piden» (Lc 11,13), ¡sobre todo si se lo piden para anunciar el Evangelio de su Hijo! ¡Cuidado con predicar sin rezar! Uno se convierte en lo que el Apóstol llama «bronces que resuenan y címbalos que retiñen» (cf. 1 Co 13:1).

Por tanto, lo primero que depende de nosotros es orar para que venga el Espíritu Santo. Lo segundo es no querer predicarnos a nosotros mismos, sino a Jesús el Señor (cf. 2 Co 4,5).

Esto se refiere a la predicación. A veces hay predicaciones largas, de 20 minutos, de 30 minutos... Pero, por favor, los predicadores deben predicar una idea, un afecto y una llamada a la acción. Más allá de ocho minutos, la predicación se desvanece, no se entiende. Y esto se lo digo a los predicadores... [aplausos] ¡Veo que les gusta oír esto! A veces vemos a hombres que, cuando empieza el sermón, salen a fumar un cigarrillo y luego vuelven a entrar. Por favor, el sermón debe ser una idea, un afecto y una propuesta de acción. Y nunca debe durar más de diez minutos. Esto es muy importante.

La segunda cosa -les decía- es no querer predicarnos a nosotros mismos sino al Señor. No es necesario que nos detengamos en esto, porque cualquiera que se dedique a la evangelización sabe bien lo que significa, en la práctica, no predicarnos a nosotros mismos. Me limitaré a una aplicación particular de esta exigencia. No querer predicarnos a nosotros mismos implica también no dar siempre prioridad a las iniciativas pastorales promovidas por nosotros y vinculadas a nuestro propio nombre, sino colaborar de buen grado, si se nos pide, en las iniciativas comunitarias, o que se nos encomienden por obediencia.

¡Que el Espíritu Santo nos ayude, nos acompañe, y enseñe a la Iglesia a predicar así el Evangelio a los hombres y mujeres de este tiempo! Gracias.

Después, al saludar a los peregrinos de lengua española, el Papa ha dicho:

Queridos hermanos y hermanas:

Hoy reflexionamos sobre la relación entre el Espíritu Santo y la evangelización. Podemos decir que en la predicación cristiana hay dos elementos constitutivos: el contenido, que es el Evangelio; y el medio, que es el Espíritu Santo. Los dos van íntimamente unidos; es decir, la Palabra de Dios se transmite con la unción del Espíritu Santo; sin el Espíritu faltaría el alma, faltaría la vida de la predicación, sólo se difundirían ideas o preceptos, pero no la vida.

Ahora bien, podríamos preguntarnos: si la acción evangelizadora depende del Espíritu Santo, ¿podemos hacer algo también nosotros? ¿Cómo es posible colaborar en la acción evangelizadora de la Iglesia? Hemos de tener en cuenta sobre todo dos principios: uno es la oración y el otro es estar atentos para no predicarnos a nosotros mismos sino a Jesús. Esto significa que, antes de afrontar un apostolado, necesitamos rezar, invocar al Espíritu Santo para que nos asista. Y esta misión tiene que estar centrada en Cristo, no en nuestros propios deseos o necesidades.

Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Estamos celebrando en estos días la Novena en preparación a la Solemnidad de la Inmaculada Concepción. Pidámosle a María nuestra Madre que, como ella, permanezcamos abiertos y disponibles a la acción del Espíritu Santo en nuestra vida y en la misión que la Iglesia nos encomienda. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide. Muchas gracias.

Además, en otras lenguas el Pontífice ha dicho: 

Por último, mi pensamiento se dirige a los jóvenes, a los enfermos, a los ancianos y a los recién casados. El tiempo de Adviento, que acaba de comenzar, nos presenta en estos días el ejemplo resplandeciente de la Virgen Inmaculada. Que ella os anime en vuestro camino de adhesión a Cristo y sostenga vuestra esperanza.

¡Y por favor, sigamos orando por la paz! La guerra es una derrota humana. La guerra no resuelve los problemas, la guerra es mala, la guerra destruye. Oremos por los países en guerra. No olvidemos a la atormentada Ucrania, no olvidemos a Palestina, Israel, Myanmar... ¡Tantos niños muertos, tantos inocentes muertos! Oremos para que el Señor nos traiga la paz. Siempre oremos por la paz.

¡Mi bendición para todos!

Francisco


Fotos: Vatican Media, 4-12-2024

Sor Verónica Donatello, con padres sordos y una hermana discapacitada, atiende a discapacitados: «En un campamento con niños escuché la Palabra de Dios, mi mundo se vino abajo y me hice monja»


Sor Verónica Donatello es responsable del servicio nacional de pastoral de las personas con discapacidad en la Conferencia Episcopal Italiana

* «Trabajaba, viajaba constantemente, pero no asistía a la parroquia, hasta que un párroco me pidió que le ayudara con unos niños con discapacidad durante un campamento de verano. Después comencé a pensar que tal vez el Señor tenía algo reservado para mí, y acepté caminar con Él, aunque en ese momento no pensaba en la vida consagrada» 

Camino Católico.- “Soy hija y hermana de personas con discapacidad. Mis padres son sordos, Chiara tiene una situación muy grave que le ha quitado autonomía y que requiere de nuestra ayuda continua. En definitiva, la discapacidad está en mi ADN”, explica la hermana Verónica Donatello, franciscana alcantarina, que ya fue nombrada Caballero de la Orden del Mérito de la República de Italia por su contribución en la inclusión de las personas con discapacidad.

Sor Verónica siempre recuerda que “el italiano es mi segunda lengua. Mis padres son sordos, siempre me he comunicado, orado y soñado con la lengua de los signos”. Por ello, aprovechó esta experiencia familiar para, una vez descubierta su vocación religiosa, entregarse en esta misión tan específica de acompañar espiritualmente a los más débiles y frágiles de la sociedad.

Pero antes ella tuvo que revertir prejuicios contra la Iglesia, descubrir a Dios y enamorarse de Él. Trabajaba en una importante cadena de televisión en Milán como intérprete del lenguaje de signos. En aquellos años milaneses de libertad, autonomía, relaciones sentimentales y de no asistir a la Iglesia, empezó a madurar en ella la idea de que eso no era suficiente. El párroco de un oratorio le invitó a realizar actividades con niños con discapacidad y quedó impactada por la historia y el ejemplo de San Francisco. Entró en el convento a los 25 años, en la Congregación de las Hermanas Franciscanas Alcantarinas, segura de haber identificado el camino que podía darle felicidad y sentido.


Sor Verónica Donatello con el Papa Francisco y una pequeña con síndrome de Down

"El Señor es un pretendiente hábil”, confiesa Verónica Donnatello. En una entrevista con Famiglia Cristiana recuerda: “Trabajaba, viajaba constantemente, pero no asistía a la parroquia, hasta que un párroco me pidió que le ayudara con unos niños con discapacidad durante un campamento de verano. Allí, por casualidad, escuché la Palabra de Dios . Y todo mi mundo se vino abajo. Empecé a hacerme preguntas". Hoy Sor Verónica es responsable del Servicio Nacional de Pastoral de las Personas con Discapacidad de la Conferencia Episcopal Italiana, así como consultora del Dicasterio para la Comunicación de la Santa Sede.

Dos tareas que, a primera vista, parecen no tener nada que ver entre sí, pero que tienen como matriz común la capacidad de saber comunicarse con todos, incluso con quienes no pueden oír o con quienes no pueden ver. Un don que se aprende primero en la familia y luego a través del estudio.

Aunque sus padres eran muy creyentes, Verónica se alejó de la Iglesia tras la Confirmación. “A mi hermana le negaron los sacramentos debido a su discapacidad. Evidentemente el párroco no estaba capacitado, pero me quedé con una sensación de gran injusticia”, afirma.

“Mis padres, sin embargo, no hicieron de este rechazo un problema personal, al contrario, lo hicieron un don en la Iglesia. Me dijeron: esto no debe volver a pasarle a nadie. He aprendido que tienes dos caminos en la vida: o eres parte del problema y te pasas el tiempo quejándote, o te conviertes en la solución. Ellos, con mucha sencillez, supieron convertir esta historia en buena. A lo largo de los años, afortunadamente se ha avanzado mucho, pero, sobre todo cuando las discapacidades son complejas o intelectuales, es difícil permanecer delante de los límites del otro, porque los límites del otro se refieren a los nuestros. A veces, incluso en la Iglesia persiste el prejuicio de pensar que el único acceso a los caminos de la fe es el intelecto", añade.


Sor Verónica Donatello quedó impresionada con la vida de San Francisco de Asís

Volviendo a su propia historia, sor Verónica relata que desde pequeña aprendió a hablar la lengua de signos italiana (ahora también internacional y francesa), por lo que el párroco le pidió que asistiera al oratorio para ayudar a los niños discapacitados. Dijo que sí de mala gana. En cambio, desde allí inició un camino de fe y de discernimiento , que la llevó a quedar "impresionada" por la vida de san Francisco: “Comencé a pensar que tal vez el Señor tenía algo reservado para mí, y acepté caminar con Él, aunque en ese momento no pensaba en la vida consagrada", dice.

“A mis familiares no les gustó mucho esta decisión. Sin embargo, las monjas que me acompañaron desde el discernimiento fueron muy acogedoras. En 2009, después de mi profesión perpetua, la familia también comprendió que mi alegría era plena. Si confías, el Señor no te quita los problemas, sino que también te da bendiciones".


Sor Verónica Donatello

Quienes la conocen dicen que sor Verónica es una fuerza de la naturaleza que logra unir a las personas y crear una red. En un momento se la puede ver jugando al baloncesto con niños en sillas de ruedas y al minuto siguiente traduciendo las palabras del Papa Francisco al lenguaje de señas.

Para ella, el verdadero paradigma es darse cuenta de que las personas con discapacidad también tienen deseos, no sólo necesidades. La perspectiva del deseo te devuelve tu personalidad, es un concepto más amplio, más bello. Y este enfoque crea la comunidad que somos nosotros. El eco del compromiso de Sor Verónica llegó al presidente Sergio Mattarella quien, en 2016, le otorgó el título de Caballero de la Orden del Mérito de la República.