25 de septiembre de 2020.- (Camino Católico) Homilía del P. Félix Castedo y lecturas de la Santa Misa de hoy, viernes de la 25ª semana de Tiempo Ordinario, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Evangelio: San Lucas 9, 18-22:
Una vez que Jesús estaba orando solo, lo acompañaban sus discípulos y les preguntó:
«¿Quién dice la gente que soy yo?»
Ellos contestaron:
«Unos que Juan el Bautista, otros que Elías, otros dicen que ha resucitado uno de los antiguos profetas».
Él les preguntó:
«Y vosotros, ¿quién decís que soy yo?».
Pedro respondió:
«El Mesías de Dios».
Él les prohibió terminantemente decírselo a nadie. porque decía:
«El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, ser desechado por los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, ser ejecutado y resucitar al tercer día».
Evangelio: San Lucas 9, 7-9:
En aquel tiempo, el tetrarca Herodes se enteró de lo que pasaba y no sabía a qué atenerse, porque unos decían que Juan había resucitado de entre los muertos; otros en cambio, que había aparecido Elías, y otros que había vuelto a la vida uno de los antiguos profetas.
Herodes se decía:
«A Juan lo mandé decapitar yo. ¿Quién es este de quien oigo semejantes cosas?».
Y tenía ganas de verlo.
Él venía del mundo de la noche. “Tenía arraigado un alcoholismo serio, consumía drogas, tenía una sexualidad bastante desordenada, no sé por qué Dios se fijó en mí porque la verdad es que tampoco lo busqué”, reconoce Javi.
Video completo de la transmisión en directo realizada por 13 TV de la catequesis traducida al español y de la síntesis que el Papa ha hecho en nuestro idioma
* «En estos días se han cumplido cinco años de mi viaje apostólico a Cuba. Saludo a mis hermanos Obispos y a todos los hijos e hijas de esa amada tierra. Les aseguro mi cercanía y mi oración. Pido al Señor, por intercesión de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, que los libre y alivie en estos momentos de dificultad que atraviesan a causa de la pandemia. Y a todos, que el Señor nos conceda construir juntos, como familia humana, un futuro de esperanza, en el que la dimensión local y la dimensión global se enriquezcan mutuamente, florezca la belleza y se construya un presente de justicia donde todos se comprometan a servir y a compartir»
Evangelio: San Lucas 9, 1-6:
En aquel tiempo, habiendo convocado Jesús a los Doce, les dio poder y autoridad sobre toda clase de demonios y para curar enfermedades.
Luego los envió a proclamar el reino de Dios y a curar a los enfermos, diciéndoles:
«No llevéis nada para el camino: ni bastón ni alforja, ni pan ni dinero; tampoco tengáis dos túnicas cada uno.
Quedaos en la casa donde entréis, hasta que os vayáis de aquel sitio.
Y si algunos no os recibe, al salir de aquel pueblo sacudíos el polvo de los pies, como testimonio contra ellos».
Se pusieron en camino y fueron de aldea en aldea, anunciando la Buena Noticia y curando en todas partes.
Evangelio: San Lucas 8, 19-21:
En aquel tiempo, vinieron a ver a Jesús su madre y sus hermanos, pero con el gentío no lograban llegar hasta él.
Entonces lo avisaron:
«Tu madre y tus hermanos están fuera y quieren verte».
Él respondió diciéndoles:
«Mi madre y mis hermanos son estos: los que escuchan la palabra de Dios y la cumplen».
El vídeo puede verse con los subtitulos en español entrando en la ruedecita de la derecha de configuración, luego en subtitulos, después en traducir automáticamente y eligiendo el español
Camino Católico.- Erwan creció en una familia católica, pero cuando empezó a estudiar Medicina en el Ejército se fue alejando de la fe: «Lejos de mis padres, rechacé toda esa tradición que había recibido. Dejé de ir a misa, dejé de rezar, dejé de creer en Dios y durante cuatro años viví una vida de estudiante expansiva, feliz, con todo lo que eso supone: tenía una novia estupenda, terminé Medicina, estaba en el Ejército, así que tenía un sueldo, hacía buenos viajes con los amigos…» afirma en el testimonio.
Este vídeo de Vatican News, producido en colaboración con varios jóvenes cristianos del Líbano, entre ellos Adeline Khouri para la recopilación de testimonios y Ethien Salameh para la edición, arroja una luz conmovedora sobre la profundidad de la piedad mariana en el Líbano, en todos los grupos de edad y orígenes sociales.