Tras las insistencias del sacerdote, Juan acudió a un retiro espiritual para aclarar un poco su mente. Y su vida cambió a partir de ese momento. Durante aquel fin de semana se pasó la mayor parte del tiempo delante del Sagrario. Las Escrituras le hablaban de su realidad. “En ese momento Dios tocó la puerta de mi corazón de una manera tremenda. Empezó a convertir mi corazón de piedra, primero en arena hasta el que el sábado me dio la puntilla. Aquella noche confesé delante de todos mi decisión de dejar el reiki. A partir de ahí comencé una vida de oración para salir de este siniestro mundo y ahora estoy muy feliz”
Camino Católico.- El reiki y la Nueva Era (New Age) están cada vez más extendidas en la sociedad por el bienestar físico y mental que producen pese a que cada vez son más los que alertan de que tras esto lo que de verdad ocurre es que se abre la puerta al demonio. Incluso entre los católicos es un gran problema pues estas técnicas se disfrazan de tal manera que se venden como algo bueno y son adoptadas por muchos fieles, también por consagrados. Y sus efectos son devastadores.