17 de agosto de 2010.- En este mundo encontramos muchas diferencias, pero lamentablemente solemos convertir esas diferencias en prejuicios e incluso barreras entre nosotros. No es raro que, al encontrar una persona que padezca alguna discapacidad, la miremos con “compasión” porque no es como los demás. Sin embargo, la mayoría de las veces estamos muy equivocados.
Ezra Frech es un niño de 4 años que nació con una malformación física: su brazo y su pierna izquierdos no crecieron correctamente. A los 3 años tuvieron que amputarle la pierna izquierda y comenzó a usar una prótesis. Y aquí comienza el milagro. «El día que comenzó a caminar –nos dice su doctor– Ezra cambió nuestras vidas, […] él ilumina este lugar». Y esto se debe a que Ezra posee una gran determinación y una enorme fortaleza que le han llevado a vencer los obstáculos que se le presentan. Leer más y ver vídeo...
Ezra Frech es un niño de 4 años que nació con una malformación física: su brazo y su pierna izquierdos no crecieron correctamente. A los 3 años tuvieron que amputarle la pierna izquierda y comenzó a usar una prótesis. Y aquí comienza el milagro. «El día que comenzó a caminar –nos dice su doctor– Ezra cambió nuestras vidas, […] él ilumina este lugar». Y esto se debe a que Ezra posee una gran determinación y una enorme fortaleza que le han llevado a vencer los obstáculos que se le presentan. Leer más y ver vídeo...