* «El mensaje de Jesús es incómodo e inconveniente porque desafía el poder religioso mundano y apela a las conciencias. Después de su venida, es necesario convertirse, cambiar la mentalidad, dejar de pensar como antes, cambiar. Esteban permaneció anclado al mensaje de Jesús hasta su muerte. Jesús es nuestro mediador y nos reconcilia no sólo con el Padre, sino también entre nosotros. Él es manantial del amor, que nos abre a la comunión con los hermanos, a amarnos entre nosotros, eliminando todo conflicto y resentimiento ¡Sabemos qué cosa fea son los resentimientos, hacen tanto daño y nos hacen tanto daño! Y Jesús elimina todo esto y hace que nos amemos. Éste es el milagro de Jesús. Pidamos a Jesús, nacido por nosotros, que nos ayude a asumir esta dúplice actitud de confianza en el Padre y de amor al prójimo; es una actitud que transforma la vida y la hace más bella y fructífera»
* «En la espera orante del nacimiento de Jesús, el Príncipe de la Paz, invocamos el don de la paz para todo el mundo, especialmente para aquellos pueblos que más sufren los conflictos en curso. Renuevo especialmente mi llamamiento para que, con ocasión de la Santa Navidad, para que las personas secuestradas -sacerdotes, religiosos, religiosas y laicos- sean liberadas y puedan regresar a sus hogares. Oremos por ellas. También deseo asegurar mis oraciones a la población de la isla de Mindanao, en Filipinas, golpeada por una tormenta que ha causado numerosas víctimas y destrucción. Dios misericordioso acoja las almas de los difuntos y consuele a los que sufren por esta calamidad. Oramos por esta gente»
Video completo de las palabras del Papa traducidas al español
* «En estas horas que nos separan de la Navidad, os pido: encontrar algún momento para deteneros en silencio y orar ante el Belén, para adorar en el corazón el misterio de la verdadera Navidad, la de Jesús, que viene a nosotros con amor, humildad y ternura. Y, en ese momento, acordaos también de rezar por mí»