* «De la amistad se debe decir lo que San Agustín afirmaba del tiempo: ‘Sé qué es el tiempo, pero si alguien me pide que se lo explique, ya no lo sé’. En otras palabras, es más fácil intuir qué es la amistad que explicarlo con palabras. Es una atracción recíproca y un entendimiento profundo entre dos personas, pero no basada en el sexo, como lo es el amor conyugal. Es la unión de dos almas, no de dos cuerpos. En este sentido, los antiguos decían que la amistad es tener «una sola alma en dos cuerpos». Puede constituir un vínculo más fuerte que el parentesco. Éste consiste en tener la misma sangre en las venas; la amistad en tener los mismos gustos, ideales, intereses»
domingo, 17 de julio de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: La verdadera amistad / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «De la amistad se debe decir lo que San Agustín afirmaba del tiempo: ‘Sé qué es el tiempo, pero si alguien me pide que se lo explique, ya no lo sé’. En otras palabras, es más fácil intuir qué es la amistad que explicarlo con palabras. Es una atracción recíproca y un entendimiento profundo entre dos personas, pero no basada en el sexo, como lo es el amor conyugal. Es la unión de dos almas, no de dos cuerpos. En este sentido, los antiguos decían que la amistad es tener «una sola alma en dos cuerpos». Puede constituir un vínculo más fuerte que el parentesco. Éste consiste en tener la misma sangre en las venas; la amistad en tener los mismos gustos, ideales, intereses»
domingo, 10 de julio de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: «¿De quién me puedo hacer prójimo, aquí, ahora?» / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Si fuéramos uno de nosotros el que le preguntara a Jesús: «¿quién es mi prójimo?», ¿qué respondería? Nos recordaría ciertamente que nuestro prójimo no es sólo el compatriota, sino también el extracomunitario; no sólo el cristiano, sino también el musulmán; no sólo el católico, sino también el protestante. Pero añadiría enseguida que no es esto lo más importante; lo más importante no es saber quién es mi prójimo, sino ver de quién me puedo hacer yo prójimo, ahora, aquí; para quién puedo ser yo el buen samaritano»
domingo, 3 de julio de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: ¿Qué es «el Reino de Dios» entre nosotros? / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Lo que Jesús decía a sus contemporáneos sirve también para nosotros hoy. Ese ‘ahora’ y ‘hoy’ permanecerá invariable hasta el fin del mundo (Hb 3,13). Esto significa que la persona que escucha hoy, tal vez por casualidad, la palabra de Cristo: ‘El tiempo de Dios se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; convertíos y creed en el Evangelio’ (Mc 1,15), se encuentra ante la misma elección que aquellos que la escuchaban hace dos mil años en una aldea de Galilea: o creer y entrar en el Reino, o rechazar creer y quedarse fuera. El Reino de Dios era tan importante para Jesús que nos enseñó a orar cada día por su venida. Nos dirigimos a Dios diciendo: ‘Venga tu Reino’; pero también Dios se dirige a nosotros y dice por boca de Jesús: ‘El Reino de Dios ha venido entre vosotros; no esperéis, ¡entrad en él!’»
domingo, 26 de junio de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: La familia de Dios (la Iglesia), garante y promotora de la familia natural / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Jesús respondió un día: ‘¿Quién es mi madre y quiénes son mis hermanos?… Todo el que cumpla la voluntad de mi Padre celestial, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre’ (Mt 12, 49-50).Jesús no deroga con ello la familia natural, pero revela una nueva familia en la que Dios es padre y los hombres y las mujeres son todos hermanos y hermanas, gracias a la común fe en Él, el Cristo»
domingo, 5 de junio de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: El Espíritu Santo actúa en el mundo / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Debemos creer que, a pesar de las apariencias, el Espíritu Santo está a la obra en el mundo y lo hace progresar. ¡Cuántos descubrimientos nuevos, no sólo en el campo físico, sino también en el moral y social! Un texto del Concilio Vaticano II dice que el Espíritu Santo está a la obra en la evolución del orden social del mundo (‘Gaudium et spes`’, 26 ). No es sólo el mal el que crece, sino también el bien, con la diferencia de que el mal se elimina, termina consigo mismo, mientras que el bien se acumula, permanece. Ciertamente aún existe mucho caos a nuestro alrededor: caos moral, político, social. El mundo tiene todavía mucha necesidad del Espíritu Santo; por ello no debemos cansarnos de invocarle con las palabras del Salmo: ‘¡Envía tu Espíritu, Señor, y renueva la faz de la tierra!’»
domingo, 29 de mayo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: ¡Jesús quiere hacerse visible a través de sus discípulos! / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Se ha hecho célebre la afirmación de Pablo VI: ‘El mundo tiene necesidad de testigos más que de maestros’. Es relativamente fácil ser maestro, bastante menos ser testigo. De hecho, el mundo bulle de maestros, verdaderos o falsos, pero escasea de testigos. Entre los dos papeles existe la misma diferencia que, según el proverbio, entre el dicho y el hecho… Los hechos, dice un refrán inglés, hablan con más fuerza que las palabras»
domingo, 22 de mayo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: La paz total del corazón sólo es posible confiando en Dios / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Esa paz del corazón que todos deseamos no se puede obtener nunca total y establemente sin Dios, fuera de Él. Dante Alighieri sintetizó todo esto en ese verso que algunos consideran el más bello de toda la Divina Comedia: ‘En su voluntad está nuestra paz’. Jesús da a entender qué se opone a esta paz: la turbación, el ansia, el miedo: ‘No se turbe vuestro corazón’. ¡Qué fácil es decirlo!, objetará alguno. ¿Cómo aplacar la ansiedad, la inquietud, el nerviosismo que nos devora a todos y nos impide disfrutar de un poco de paz? El Evangelio no promete una panacea para estos males; en cierta medida, forman parte de nuestra condición humana, expuestos como estamos a fuerzas y amenazas mucho mayores que nosotros. Pero indica un remedio. El capítulo del que procede el pasaje del evangelio dominical empieza así: ‘No se turbe vuestro corazón. Tened fe en Dios y tened fe también en mí’ (Jn 14,1)»
domingo, 15 de mayo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: El Espíritu de Amor del Resucitado hace nuevas todas las cosas / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «El mandamiento de Jesús es un mandamiento nuevo en sentido activo y dinámico: porque «renueva», hace nuevo, transforma todo. ‘Es este amor que nos renueva, haciéndonos hombres nuevos, herederos del Testamento nuevo, cantores del cántico nuevo’ (San Agustín). Si el amor hablara, podría hacer suyas las palabras que Dios pronuncia en la segunda lectura de hoy: ‘He aquí que hago nuevas todas las cosas’»
domingo, 8 de mayo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: La dimensión de Cristo como «buen pastor» / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Jesús conoce a sus discípulos (y, en cuanto Dios, a todos los hombres); les conoce «por su nombre», que para la Biblia quiere decir en su esencia más íntima. Él les ama con un amor personal que llega a cada uno como si fuera el único que existe ante Él. Cristo no sabe contar más que hasta uno: y ese uno es cada uno de nosotros»
domingo, 1 de mayo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: «¿Me amas?», sigue preguntando Jesús a cada uno / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Jesús hace que el amor por Él consista en servir a los demás: ‘¿Me amas? Apacienta mis ovejas’. No quiere ser Él el que reciba los frutos de este amor, sino quiere que sean sus ovejas. Nuestro amor por Cristo no debe quedarse en un hecho intimista y sentimental, sino que debe expresarse en el servicio de los demás, en hacer el bien al prójimo. La Madre Teresa de Calcuta solía decir: ‘El fruto de amor es el servicio, y el fruto del servicio es la paz’»
domingo, 27 de marzo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: La conversión es la sonrisa del pecador… y de Dios / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «En una novela suya, Dostoiewski describe una escena que tiene todo el ambiente de una imagen real. Una mujer del pueblo tiene en brazos a su niño de pocas semanas, cuando éste –por primera vez, dice ella- le sonríe. Compungida, se hace el signo de la cruz y a quien le pregunta el por qué de aquel gesto le responde: ‘De igual manera que una madre es feliz cuando nota la primera sonrisa de su hijo, así se alegra Dios cada vez que un pecador se arrodilla y le dirige una oración con todo el corazón’ ( L’Idiota , Milano 1983, p. 272). Tal vez alguno, al oír, decida dar por fin a Dios un poco de esta alegría, brindarle una sonrisa antes de morir…»
domingo, 6 de marzo de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: Orar y escuchar la voz del Padre, una invitación para todos / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «Jesús no fue al desierto para ser tentado; su intención era retirarse en el desierto a orar y a escuchar la voz del Padre. La invitación a seguir a Jesús al desierto no se dirige sólo a monjes y ermitaños. De manera distinta, también se dirige a todos. Monjes y eremitas han elegido un espacio en el desierto; nosotros debemos elegir al menos un tiempo de desierto. Pasar un tiempo de desierto significa hacer un poco de vacío y de silencio en torno a nosotros; reencontrar el camino de nuestro corazón, sustraernos al bullicio y a los apremios externos, a fin de entrar en contacto con las fuentes más profundas de nuestro ser y de nuestro creer»
domingo, 13 de febrero de 2022
Homilía del Evangelio del Domingo: Los dos caminos posibles para toda persona / Por Cardenal Raniero Cantalamessa, OFM Cap.
* «La línea que divide, en nuestro Evangelio, a los ‘bienaventurados’ de los ‘desventurados’ no es así; es una barrera móvil, absolutamente posible de atravesar. No sólo se puede pasar de un sector a otro, sino que toda esta página del Evangelio fue pronunciada por Jesús para invitarnos y animarnos a pasar de una a otra esfera. La suya no es una invitación a hacernos pobres, ¡sino a hacernos ricos! ‘Bienaventurados vosotros, los pobres, porque vuestro es el reino de Dios’. Pensemos: pobres que poseen un reino, ¡y lo poseen ya desde ahora! Aquellos que deciden entrar en este reino son, en efecto, desde ahora hijos de Dios, son libres, son hermanos, están llenos de esperanza de inmortalidad. ¿Quién no desearía ser pobre de esta forma?»
domingo, 15 de junio de 2014
Comentario del Evangelio del Domingo: La Trinidad revela el secreto de relaciones humanas bellas / Por Raniero Cantalamessa, ofmcap.
Éxodo 34, 4b-6.8-9; 2 Corintios 13, 11-13; Juan 3, 16-18
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domingo, 18 de mayo de 2014
Comentario del Evangelio del Domingo: La respuesta cristiana a la pregunta humana más inquietante / Por Raniero Cantalamessa, ofmcap.
Hechos 6, 1-7; 1 Pedro 2, 4-9; Juan 14, 1-12
18 de mayo de 2014.- En el libro del Génesis se lee que después del pecado Dios dijo al Hombre: «Con el sudor de tu rostro comerás el pan, hasta que vuelvas al suelo, pues de él fuiste tomado. Porque eres polvo y al polvo tornarás» (Gn 3, 19). Cada año, el miércoles de Ceniza, la liturgia nos repite esta severa advertencia: «Recuerda que polvo eres y en polvo te has de convertir».
domingo, 30 de marzo de 2014
Comentario del Evangelio del Domingo: La fe cristiana no es creer algo, sino en alguien / Por Raniero Cantalamessa, ofmcap.
I Samuel 16,1b.4a.6-7.10-13; Efesios 5,8-14; Juan 9, 1-41
29 de marzo de 2014.- (Camino católico) La curación del ciego de nacimiento nos toca de cerca, porque en cierto sentido todos somos... ciegos de nacimiento. El mundo mismo nació ciego. Según lo que nos dice hoy la ciencia, durante millones de años ha habido vida sobre la tierra, pero era una vida en estado ciego, no existía aún el ojo para ver, no existía la vista misma.
domingo, 20 de octubre de 2013
Comentario del Evangelio del Domingo: «El cristiano existe para la Eucaristía y la Eucaristía para el cristiano» / Por Raniero Cantalamessa, ofmcap.
Exodo 17, 8-13a; 2 Timoteo 3, 14-4,2; Lucas 18, 1-8
domingo, 4 de agosto de 2013
Comentario del Evangelio del Domingo: Lo más importante no es tener bienes, sino hacer el bien / Por Raniero Cantalamessa OFM Cap
Eclesiastés 1,2;2,21-23; Colosenses 3, 1-5.9-11; Lucas 12, 13-21
4 de agosto de 2013.-El Evangelio del domingo arroja luz sobre un problema fundamental para el hombre: el del sentido de actuar y trabajar en el mundo, que Qohélet en la primera lectura [Eclesiastés] expresa en términos desconsoladores: «¡Vanidad de vanidades, todo es vanidad! ¿Qué saca el hombre de toda la fatiga con que se afana bajo el sol?».
Uno entre la gente pidió a Jesús que interviniera en un litigio entre él y su hermano por cuestiones de herencia. Como a menudo, cuando presentan a Jesús casos particulares (si pagar o no el tributo al César; si lapidar o no a la mujer adúltera), Él no responde directamente, sino que afronta el problema en la raíz; se sitúa en un plano más elevado, mostrando el error que está en la base de la propia cuestión. Los dos hermanos están equivocados porque su conflicto no deriva de la búsqueda de la justicia y de la equidad, sino de la codicia. Entre ellos ya no existe más que la herencia para repartir. El interés acalla todo sentimiento, deshumaniza. Leer más...
viernes, 14 de junio de 2013
Comentario del Evangelio del Domingo: «La conversión es el camino a la felicidad y a una vida plena» / Por Raniero Cantalamessa OFM Cap
2 Samuel 12,7-10.13; Gálatas 2, 16.19-21; Lucas 7, 36-8,3
14 de junio de 2013.- Hay páginas del Evangelio en las que la enseñanza está tan unida al desenvolvimiento de la acción que no se percibe plenamente la primera si se la separa de la segunda. El episodio de la pecadora en casa de Simón –que se lee en el Evangelio del XI domingo del Tiempo Ordinario- constituye una de éstas. Se abre con una escena callada; no hay palabras, sino sólo gestos silenciosos: entra una mujer con un frasco de aceite perfumado; se acurruca a los pies de Jesús, los empapa en lágrimas, los seca con sus cabellos y, besándolos, los unge con perfume. Se trata casi con certeza de una prostituta, porque esto significaba entonces el término «pecadora» referido a una mujer. Leer más...
sábado, 27 de agosto de 2011
Es preciso negarse a sí mismo para poder vivir / Por Raniero Cantalamessa, OFM cap.
Quien quiera venir tras de mí, niéguese a sí mismo: XIX Domingo del tiempo ordinario
Jeremías 20, 7-9; Romanos 12, 1-2; Mateo 16, 21-27
27 de agosto de 2011.- En el evangelio de este domingo escuchamos a Jesús que dice: “Si alguien quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, coja su cruz y me siga. Porque quien quiera salvar su vida la perderá, pero quien pierda su vida por causa mía, la encontrará”.
¿Qué significa “negarse a sí mismo”? Es más, ¿por qué hay que negarse a sí mismo? Conocemos la indignación que suscitaba en el filósofo Nietzsche esta exigencia del Evangelio. Comienzo respondiendo con un ejemplo. Durante la persecución nazi, muchos trenes cargados de hebreos partían desde todas partes de Europa hacia los campos de exterminio. Se les convencía de subir a ellos con falsas promesas de llevarlos a lugares mejores por su bien, mientras que en cambio se les llevaba a la destrucción. A veces sucedía que en alguna parada del convoy, alguien que sabía la verdad gritaba a escondidas a los pasajeros: bajad, huid. Y alguno lo conseguía. Leer más...
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