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Bienvenido a Escuchar y a Dar

Este blog, no pretende ser un diario de sus autores. Deseamos que sea algo vivo y comunitario. Queremos mostrar cómo Dios alimenta y hace crecer su Reino en todo el mundo.

Aquí encontrarás textos de todo tipo de sensibilidades y movimientos de la Iglesia Católica. Tampoco estamos cerrados a compartir la creencia en el Dios único Creador de forma ecuménica. Más que debatir y polemizar queremos Escuchar la voluntad de Dios y Dar a los demás, sabiendo que todos formamos un sólo cuerpo.

La evangelización debe estar centrada en impulsar a las personas a tener una experiencia real del Amor de Dios. Por eso pedimos a cualquiera que visite esta página haga propuestas de textos, testimonios, actos, webs, blogs... Mientras todo esté hecho en el respeto del Amor del Evangelio y la comunión que siempre suscita el Espíritu Santo, todo será públicado. Podéís usar los comentarios pero para aparecer como texto central enviad vuestras propuestas al correo electrónico:

escucharlavoz@yahoo.es

Oremos todos para que la sabiduría de Jesús Resucitado presida estas páginas y nos bendiga abundamente.

Página web de Escuchar la Voz del Señor

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sábado, 9 de agosto de 2008

Testimonio de Marino Restrepo: Rescatado del Infierno - Experiencia mística con Dios

Marino Restrepo nos narra su impactante testimonio. La vida de Marino estaba centrada en el dinero, la fama y totalmente entregada al placer.

La vida de Marino cambió drásticamente debido a trascendentales acontecimientos que lo marcaron para siempre y que son narrados por él mismo en este extraordinario testimonio.

Vídeo 1

Vídeo 2

Vídeo 3

Vídeo 4

Vídeo 5

Vídeo 6

Vídeo 7

Vídeo 8

¿Como orar eficientemente?

jueves, 7 de agosto de 2008

Testimonio del primer milagro constatado atribuido a la Madre Teresa de Calcuta y que impulsó su causa de beatificación


Otros milagros

Madre Coraje / Autora: María Vallejo-Nágera

(Revista Misión)Candela llegó a mi vida una mañana de abril lluvioso, con ojos colmados de tristeza y el corazón contrito, de la mano de una amiga común. “Yo ya no creo en Dios, ni siquiera puedo rezar”, dijo a modo de presentación. “Cuéntanos qué te afl ige, Candela”, sugerí. “Dices no tener fe, pero nosotras podemos rezar por ti”.

FUE ENTONCES cuando nuestra nueva amiga rompió el cascarón del miedo y escupió, entre amargas lágrimas, la causa de su visita a nuestro grupo de oración. Todo su dolor provenía de un hijo adolescente cuyo nombre era Pedro.

Pedro había sido un muchacho muy amado, sensible, inteligente y popular, había proporcionado grandes alegrías a sus padres a lo largo de toda su infancia. Pero todo se había truncado al cumplir los 16 años, cuando comenzó a salir y disfrutar con compañías poco recomendables.
Sus nuevos amigos lo introdujeron en el mundo de la noche, de las
peleas y de las drogas, y éstas, al fi n, se adueñaron de Pedro.

Candela y su esposo no tardaron en percatarse del cambio de carácter de su hijo. La armonía con los hermanos se había deteriorado y pronto comenzaron las peleas, los celos y los pequeños hurtos en el hogar. Pedro se había convertido en drogadicto y había caído en las garras de una terrible enfermedad: la esquizofrenia, causada, según los muchos psiquiatras que tuvieron que consultar, por un desequilibrio químico en el cerebro provocado por la ingesta de terribles mezclas letales de diferentes drogas.

Nosotras escuchamos su lamento con atención. Como madres, nos estremecimos sintiendo su miedo, su amargura y desesperanza. ¿Qué madre no teme algo así? “Candela”, dije al fin. “Dices que no puedes rezar, pero nosotras sí podemos hacerlo. Déjanos al menos entregaros a
ambos a Dios a través de nuestras plegarias. Nuestra reunión consiste precisamente en eso: en unirnos en oración durante una hora a la semana para rogar por nuestros hijos, preocupadas por el torbellino de acontecimientos que últimamente observamos que sucede en nuestra sociedad. Las cosas no van bien para los jóvenes: hay demasiada violencia en las calles, se cometen atrocidades incomprensibles y cada vez se aceptan con mayor ligereza vicios de extrema peligrosidad que rompen familias. Agarradas a nuestra fe, pensamos que nuestras oraciones, como gritos de socorro al cielo, pueden proteger a nuestros pequeños. Así nos hemos convertido en unas pequeñas madres coraje, humildes soldados contra la maldad que les rodea. Nosotras no podemos hacer mucho, pero Dios sí. Y tenemos el convencimiento de que Él nos escucha y actúa protegiendo, ayudando y acompañando a nuestros hijos”.

No hay palabras para describir la fuerza sobrenatural que tras nuestro encuentro invadió a Candela. Aquel primer día, impulsada por nuestra
seguridad y nuestra fe, quiso aprender a orar, a entregar a su hijo herido de muerte a Dios. Hoy es asidua a nuestras reuniones y acude con alegría y templanza.

Pedro aún sufre mucho, pero mejora poco a poco gracias a la fuerza y al amor que su madre le transmite cada día. Candela es la misma buena, bella y paciente madre, pero ahora tiene un arma letal contra la desesperación que antes había extraviado: la esperanza en Dios; y sólo eso la ha convertido en una verdadera y extraordinaria madre coraje.

(Para saber más sobre el movimiento de “Los
grupos de oración de las madres en España”,
dirigirse a:
charolafita@hotmail.com)

Testimonio después de Sydney: "El Espíritu Santo si que ha trabajado en mi..." / Autor: Jaime Barbeyto

"... lo ha hecho cuando yo estaba cansado y sin fuerzas"
(De Caná a Sidney)“Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo y seréis mis testigos”. Este era el lema de la JMJ. Cuando estábamos volviendo a casa me entró la duda: ¿habré recibido el Espíritu Santo? Al principio me entró el agobio, pensé que no, que había desaprovechado el viaje. Me entró la vergüenza de pensar que durante el viaje había “pasado” de Dios para pasármelo bien yo, como que no le había dedicado el tiempo suficiente, ni tampoco las ganas, y me sentí fatal de pensar que, por mi culpa, todas las gracias que Dios ha volcado en este viaje yo me las había perdido. No había cambiado nada en mí, no había sentido nada especial, sino más bien al contrario, había desaprovechado el sagrario que teníamos en Melbourne, había rezado menos de lo que me había propuesto antes del viaje…

Poco a poco, y como sin venir a cuento, al ir pasando los días, me venían a la cabeza trozos de las homilías, de los discursos del Papa, de la catequesis del obispo de Mallorca… y eso a pesar de que la mitad de las veces, de puro cansado que estaba, no era capaz de mantener la atención a lo que nos decían. Todavía estoy impresionado de lo fuerte que se me han grabado los mensajes por dentro. Eso me ha hecho pensar que el Espíritu Santo si que ha trabajado en mi, y lo ha hecho a su manera, que es sin que yo me diera cuenta, y además lo ha hecho cuando yo estaba cansado y sin fuerzas, para que yo no me equivoque y me crea que el mérito es mío y de lo listo que soy, sino que quede clarito que ha sido cosa suya.

La otra parte del mensaje es “y seréis mis testigos”. A esta parte es a la que le he dado más vueltas, porque al fin y al cabo, el viaje ya está hecho, mejor o peor, y no lo podemos cambiar. Ahora lo que toca es lo de ser testigos. Y yo pensé: ¿y ahora, que narices hago para ser testigo?

Me vino a la cabeza un día una frase de san Agustín que me gusta mucho. Es una frase de sus confesiones, y en la que el santo le dice a Dios: “dame lo que me pides, y pídeme lo que quieras”. Esto quiere decir que, para que podamos hacer algo, Dios nos lo tiene que conceder primero, nosotros no podemos nada. Es como la anécdota que contó don Jesús de cuando le compraba las flores a su madre con el dinero que ella le daba.

Pues lo de ser testigos de Dios, en el fondo, es una tontería, porque ya se va a encargar Él de hacerlo todo. Por eso, cuando salió lo de los grupos de los jueves, me alegré tanto, y así lo dije la noche de los testimonios, porque es la mejor forma de ser testigos de Cristo, o al menos es la mejor forma que yo tengo: juntarme con vosotros, que como dijo Arturo aquella noche, tenéis todos “corazones grandes”, y como los Apóstoles, en grupo, vivir juntos nuestra fe, que ya se convertirá el mundo si Dios quiere que lo convirtamos.

Además, con lo de ser mis testigos, yo me agobié en el viaje, porque el año que viene empiezo a trabajar, y hasta ahora era muy “fácil” eso de ser testigo de Cristo, en clase, con mis amigos, que aunque me da un poco de corte, en el fondo sé que aunque me vacilen, nunca van a pensar mal de mí. En cambio, en el trabajo, ¿con qué cara intento yo convertir a mi jefe? No me veo capaz. Pero como nos dijo el obispo de Mallorca, no se trata tanto de hacer, como de ser. Eso me ha dado mucha paz, pensar que lo único que tenemos que hacer para ser como los Apóstoles es ser nosotros mismos, siendo buenos cristianos, y lo mismo que antes, con eso convertiremos el mundo si Dios quiere que lo hagamos.

Gente, me ha encantado conoceros, así que espero que nos sigamos viendo todos los jueves o cuando sea, pero que nos sigamos viendo. Buen verano y poneos cremita en la playa que el sol de aquí no es como el de Sidney!

La trastienda de la JMJ: La cruz y la misericordia de Dios en el Cardenal George Pell / Autor: Fulgencio Espa

(De Madrid al Cielo) George Pell, ex jugador de fútbol australiano, es en la actualidad cardenal-arzobispo de Sydney. Su figura, enorme (tanto por dentro como por fuera), nos ha dejado a algunos un tanto impresionados. Es necesario profundizar en su figura.

En agosto del año 2002, George Cardinal Pell fue acusado por un menor de 12 años de abuso sexual. Pell abandonó voluntariamente la sede episcopal hasta el esclarecimiento de la cuestión. Tiempo después, el acusador confesó la calumnia y las aguas volvieron a su cauce, haciendo buenas, eso sí, las palabras del refrán "calumnia que algo queda".

Fue un tiempo de tribulación para el cardenal. Durante ese tiempo -y no sé si antes-, Pell confió su dirección espiritual al entonces Consiliario del Opus Dei en Australia. Recibió mucho apoyo y no menos comprensión.
Lo cierto es que una vez restablecida la figura del Cardenal, fue descubierto un cáncer terminal al que había sido su director espiritual. Catalán de nacimiento, decide venir a morir a España. En concreto, pasa sus últimas semanas en la universidad de Navarra, con cuidados paleativos y una atención personalizada.

Enterado de esto, el Cardenal Pell no pierde el tiempo. Poco antes de que su amigo muera, cogió un avión para España -24 horas de vuelo, 10 de escalas, 8 de diferencia horaria- para atender a su amigo sacerdote. Fue a la universidad de Navarra y pidió atender integralmente al antiguo consiliario. Dormía en su cuarto, le limpiaba, le ayudaba... y le dio los sacramentos. Una semana. Y, por lo visto, siempre decía lo mismo "tengo que estar aquí para atender a aquel que más me quiso en momentos de dificultad". Esa es la talla del cardenal Pell.

Está en la trastienda de la JMJ la heroica lucha del arzobispo de aquella diócesis. Su homilía de la Misa de comienzo de la jornada no tiene desperdicio. Imprímela. Rézala... Viene de uno de los grandes...

Oración de Sanación por el padre Moises Larraga

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Video 2

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¿Si Dios es tan bueno por qué permite el mal?

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miércoles, 6 de agosto de 2008

Testimonio de curación: ¡Por tus llagas, yo fui sanado! / Autor: Neil Velez, fundador de la comunidad Misioneros de Jesús

(Comunidad Canción Nueva) Hermanos, sin Jesús no hay esperanza, nosotros podemos pedir, pedir, pero sin Jesús en nuestras vidas, como Señor y Salvador no hay esperanza. Hay muchos que intentan vivir sin Dios, viven en el dinero, en la carne, en las fiestas, en las supersticiones, pero inmediatamente ellos perciben que hay un vacío en el alma, pues el único que puede llenar este vacío es Jesús, sin Él no vivimos. Nuestra mayor acción de gracias, de todos los días, la primera cosa que debemos hacer todas las mañanas es levantar las manos hacia Dios y agradecerle por habernos dado a Jesucristo, quién tiene a Él tiene todo.

En Hebreos 11, 1 dice: “La fe es el fundamento de la esperanza, es una certeza acerca de lo que no se ve.” A veces no sabemos esperar en Dios por las inseguridades que tenemos en Él y perdemos su gloria. Dios llega hasta donde nosotros lo llevemos y si yo no creo, Dios tampoco creerá, todo depende de nuestra fe. El secreto no esta en saber que Dios puede hacer aquello que pedimos, sino en saber que Él lo hará. Lo que nosotros obtendremos es aquello que pedimos creyendo que Dios ya nos lo ha concedido, tenemos que creer que tenemos un Dios que se manifiesta a través de nuestra fe, pues Él honra nuestra fe. Nosotros tenemos un Dios que desea manifestarse en nuestras vidas y que simplemente espera por nosotros.

Yo nací enfermo. Los médicos le dijeron a mi madre que yo nacería enfermo, los médicos decían que ella correría grandes riesgos si decidía darme a luz y los médicos le sugirieron que me abortara. Ella como una buena mujer católica resolvió darme la oportunidad de nacer y por esta decisión que ella tomó, hoy estoy aquí. Yo nací exactamente como los médicos habían dicho, las válvulas de mi corazón no funcionaban, yo tenía el cuerpo deformado y permanecí un año separado de mi madre.

Sufría de hemorragias internas, tenía meningitis y aparecían tumores por todo mi cuerpo, hasta quedé ciego. Especialistas me analizaron y llegaron a la conclusión de que yo tendría solamente tres meses de vida. En el hospital yo había acabado de tener una crisis cuando recordé un versículo que se encuentra en la Biblia y este versículo me incomodaba mucho, este versículo esta en 1Pedro 2, 24 y me incomodaba porque estaba en el pasado y decía que “por sus llagas fuimos curados”, me decía que yo no esperara la cura, porque yo ya había sido curado y yo no entendía porque estaba allí en aquella cama del hospital muy enfermo, casi muriendo.

Yo sentí que aquel versículo no hablaba solamente de mi salvación, sino decía también que yo estaba curado de mis enfermedades. En aquel cuarto de hospital comencé a pensar que, o eso era una mentira o de lo contrario yo no conozco a Dios y oí una voz bien clara diciendo: “Hijo mío, tú no me conoces”. Mi familia vivía en la Iglesia y en misión predicando, desde pequeño yo los acompañaba, servía, fui formado en la Iglesia, fui educado en la Iglesia y hasta fui a un seminario y ahora aquella voz me decía que yo no Lo conocía.

Cuestioné aquella voz, pues mi vida siempre fue dentro de la Iglesia y aquella voz venía a decir que yo no conocía a Dios, pero yo creía que conocía a Dios, pero en la verdad yo estaba muy lejos de Él. En mi caso, yo no perdía una Eucaristía, una Misa, no dejaba de rezar, pero no tenía una experiencia con Dios, de ahí pude entender lo que la voz quería decirme. En llantos, yo dije al Señor: “es verdad Señor, yo no te conozco, pero hoy yo quiero conocerte”, y en aquel momento algo muy fuerte vino sobre mí que me causó un fuerte dolor de cabeza, algo insoportable. Grité tanto, que los médicos vinieron al cuarto e intentaron calmarme, pero aquel dolor era muy fuerte y en el momento en que yo paré de llorar, abrí los ojos y percibí que podía ver de nuevo.

Los médicos se quedaron maravillados con los exámenes que me hicieron, pues los tumores desaparecieron, yo ya no tenía más meningitis y por eso yo podía volver a ver. Pero los médicos, sin creer, dijeron que yo podía haber mejorado, pero aquello era dudoso y que yo aún estaba muriendo y en la verdad quien estaba muriendo era mi corazón viejo. En aquella noche nacía un nuevo Neil, con una nueva fe y yo comencé a caminar en esta fe. Yo le dije a los médicos que yo no moriría y ellos me decían que no existía nada que me hiciera mejorar y yo insistí con ellos diciendo que yo no moriría. Ellos preguntaron:” ¿Quien le dijo a usted que no morirá? y yo les dije: “¡Dios me habló! ¡Porque, por sus llagas yo fui curado!”

Yo entonces necesitaba ejercer la fe, aquello en lo cual yo estaba creyendo, la fe es la acción del creer, es el verbo del creer. No podemos tener una fe parada, necesitamos tener una fe que glorifique a Dios. Si yo creía estar curado necesitaba demostrar que estaba curado, en pensamientos, actos y palabras. Insistí para volver a mi casa, los médicos no querían dejarme, pero fui para mi casa. Mi padre y mi madre, para que mi muerte no los sorprendiera, hicieron toda la preparación de mi funeral y en casa yo encontré los contratos de la funeraria y les dije a ellos:“o rasgan eso o lo venden, pues no moriré, PORQUE POR LAS LLAGAS DE JESÚS HE SIDO SANADO”

Todos me entregaban a la muerte, líderes, sacerdotes, obispos, me decían que yo moriría. Es triste cuando todos desisten de ti, la medicina, tu familia, la Iglesia, hasta mi propio cuerpo. Si la Palabra me decía que yo estaba curado, yo necesitaba actuar como tal. Fui a los grupos de oración a dar testimonio de mi cura y muchos sabían que yo estaba enfermo y cuando yo testimoniaba, ellos decían que yo estaba mintiendo, pero yo no estaba mintiendo, estaba sólo caminando en la fe.

Mi propia madre le dijo a mis hermanos de la comunidad Misioneros de Jesús que no me creyeran, pues la enfermedad estaba tomándome de tal forma que yo había quedado loco, pero yo sabía que esas cosas eran espirituales. Esas cosas a nosotros nos parecen locura, sin embargo, el espíritu comprende. Comencé a caminar y a salir en misión, pero fue difícil, pues todos habían desistido de mí. Tengo una Biblia en casa que en el mismo versículo que decía de mi sanación esta manchado de sangre, pues mientras yo testificaba, tenía hemorragias internas y la sangre goteaba sobre aquel versículo. Muchas veces yo terminaba de dar el testimonio y tenía convulsiones, y mis amigos me llevaban al hospital.

Hoy yo doy este testimonio porque Jesús hizo esto conmigo y también podrá hacer eso contigo. Yo llevo esta palabra a todo el mundo. Yo he visto al Señor sanar cáncer, SIDA, vi a Dios levantar a cinco muertos. ¡Cree en Dios y dejale ser Dios en tu vida, si tú crees verás la Gloria de Dios, si Él hizo esto conmigo, lo hará contigo también!

Neil Velez - Jesus Resucito (ha derrotado tus enfermedades)

Jonas Brothers, Selena Gómez y Miley Cyrus, artistas de Disney, promueven la castidad

(Argentinos Alerta) Jonas Brothers, Selena Gómez y Miley Cyrus, han sido vistos usando el anillo de la castidad

Algunos de los artistas juveniles más destacados del momento como lo son Jonas Brothers, Selena Gómez y la protagonista de Hannah Montana, Miley Cyrus, han sido vistos usando el anillo de la pureza (purity ring) como símbolo de su castidad hasta el matrimonio.

Los anillos de la pureza o anillos de castidad fueron creados en los Estados Unidos en los años noventa por cristianos y miembros pertenecientes a grupos de abstinencia sexual.

Los anillos simbolizan el compromiso con Dios y de quienes los usan, como un recordatorio de practicar el celibato hasta el día de la boda. Actualmente los anillos se venden mucho entre los adolescentes, o a padres que los compran para dárselo a sus hijos como regalo.

El anillo se lleva generalmente en el anular izquierdo y aunque no tiene un estilo particular, algunos llevan una piedra de diamante u otra piedra preciosa, otros llevan grabado el mensaje a “El verdadero amor espera”, y muchos de los anillos usados por cristianos tienen diseñado una cruz.

Recientemente se ha visto a varios de los actores de Disney usar estos anillos, que se pueden conseguir en iglesias, joyerías y diferentes sitios de Internet.

Miley Cyrus, una de las jóvenes más famosas del mundo, conocida por su personaje de Hannah Montana, aseveró que se conservará casta y pura hasta que encuentre al hombre de su vida.

La artista declaró a la revista Vanity Fair que es virgen, que está orgullosa de ello y además que pretende continuar siéndolo durante algún tiempo. ”Me gusta verme como una chica a la que nadie ha podido conseguir, a la que nadie puede tener en sus manos”, señaló.

Por su parte Jonas Brothers, la banda compuesta por Joe, de 18 años, Kevin, de 20, y Nick, de 15, lucen todo el tiempo su famoso anillo Tiffany con el que demuestran su postura en contra de las relaciones prematrimoniales.

“Esto (el anillo) es la promesa a nosotros y a Dios: nos mantendremos puros hasta el matrimonio”, aseguró Joe a la publicación Details.

Otra de las estrellas de Disney que porta el anillo es Selena Gómez, la actriz de 16 años de la serie Los Hechiceros de Waverly Place, quien lo usa desde el día que su padre se lo regaló.

“Mi papá me usa como un ejemplo para otros niños. Él fue a la iglesia y lo trajo (el anillo) bendecido. Voy a cumplir mi promesa por mí misma, mi familia y Dios”, expresó.

Aunque hay quienes piensa que se trata sólo de un montaje publicitario para llamar la atención de los medios de comunicación, muchos padres aplauden la decisión de estos artistas ya que reconocen que se han convertido inevitablemente en un icono de la juventud.

"Su rostro resplandecía como el sol" / Video reflexión: P. Jesús Higueras

martes, 5 de agosto de 2008

Después de Sydney: "Los momentos más felices de mi vida han sido los que me he sentido cerca de Cristo" / Autor: Eduardo Castro López

(De Caná a Sidney) Han pasado ya varios días desde que el último grupo de nuestra Parroquia llegó a Madrid, y me atrevo a decir que todos habremos contado nuestro viaje a familiares y amigos entre cinco y diez veces, muchas de las cuales suponen enseñar las fotos y mostrar los recuerdos a modo de koalas o boomerang que nos hemos traído.

Nuestro viaje podría pasar desapercibido como un gran viaje de placer al fin del mundo sino fuese por la inyección del Espíritu Santo que hemos recibido, por la paz interior que nos ha llenado esos días y por nuestro encuentro con Cristo. Pero eso desgraciadamente solo lo entendemos nosotros; nadie a quien se lo contemos podrá sentir o percibir lo mismo. Es cierto que personas que han vivido algún otro encuentro con Cristo en una JMJ te “entenderá”, si es un creyente o un familiar se alegrará mucho de ver lo feliz que estas por estar cerca de Él, y si no es creyente se alegrará de verte feliz, pero se centrará en las fotos de la Opera, de canguros o a lo sumo de lo cerca o lejos que estaba el Papa de nosotros.

Los momentos más felices de mi vida han sido los que me he sentido cerca de Cristo, independientemente de que mi situación personal en ese momento sea buena o mala, pero bien es cierto, que yo al menos, me empeño una y otra vez en alejarme de aquello que me hace sentirme bien, que me da paz interior y que hace que mis problemas se vean desde una perspectiva mucho mas asequible.

Nos han pedido que demos testimonio, que no fallemos a Cristo en esto, que lo que hemos vivido lo compartamos, y mas aún con quién lo necesita. Hemos recibido mucho en este viaje y ahora nos toca a nosotros, hay que contar lo vivido porque si hemos sido tan felices, como no vamos a querer compartir esa felicidad con los demás. Y no debemos olvidar que solos es difícil, si creemos que Sydney´08 ha terminado en Barajas, difícilmente continuará en nuestros corazones y será imposible dar testimonio.

Esto no puede acabar aquí, debemos continuar unidos en nuestro “grupo Sydney”, y recibir catequesis de D. Jesús (que ha sido lo que más he agradecido de este viaje) o de D. Nicolás o D. Juan Luis. Juntos será mucho más fácil que divulguemos lo vivido, por el bien de todos.

Las herejías de la iglesia-secta "Creciendo en gracia" en la que su lider dice que es Jesucristo

Creemos que muchos hermanos evangelicos intentan vivir una vida acorde con el evangelio y que son hombres y mujeres de profunda oración. Por eso, no podemos considerar la iglesia "Crecer en Gracia" como parte de los evangélicos sino como una secta. Tienen un satélite propio en el espacio y una estación de televisión llamada "Tele Gracia" . Su líder-fundador, José Luis de Jesús Miranda dice que es Jesucristo. En el siguiente reportaje se puede ver todas las herejías que proclama y la gran incidencia que está teniendo.

Los siguientes vídeos pueden herir los sentimientos religiosos´por su claridad expositíva, pero verlos puede suponer que muchas personas abran los ojos.
Vídeo 1

Vídeo 2

"Estuvimos todo el día rezando...hemos sido felices...hemos estado con Dios y eso llena a cualquiera" / Autor: Andrés Mª Vicent

(De Caná a Sidney) Hace ya una semana que volvimos de Sidney y creo que todos desearíamos seguir ahí. Por lo menos eso es lo que se deduce navegando por esa galaxia llamada "tuenti" dento de este universo de internet. En la ventanita que indica el estado del usuario, practicamente todos los "peregrinoscana" se refieren a su estancia en las antípodas: "missing sidney", "viva el Papa" , "austalianize", "caminando hacia Galilea", "viva Sidney", "missing Australia" , menos alguna que no satisfecha todavía se ha apresurado a estar en "NY".

Yo antes de partir no hubiese creído en este resultado, no creo que muchos lo hubiesen hecho.

Que 121 adolescentes con sus "pavos" y sus hormonas volviesen encantados de tener misa y meditación diaria, adoraciones e incluso rosarios. ¡Sin alcohol! Normalmente cuando en una fiesta no hay alcohol baja mucho su cache pues bien en esta no la había y no creo que ninguno pueda decir que no le haya gustado más que muchas, o que todas.

"Si vais a estar todo el día rezando" o el consiguiente "Ojala no estemos todo el día rezando". Pues sí estuvimos todo el día rezando, y haciendo otras muchas cosas, y el resultado es que hemos sido verdaderamente felices durante más de dos semanas porque hemos estado con Dios y eso llena a cualquiera. Eramos personas normales, muchos no rezábamos habitualmente, algunos olvidaban a veces la misa del domingo, todos hemos vuelto llenos de Cristo y deseando ser fieles a Él.

"Yo fui a hacer turismo" no me digas que echas de menos el turismo porque para eso date un paseo por el museo del Prado.

El estado tuenti que creo mejor definía esta situación nostálgica es el de cierta peregrina: "con mono de Australia" pues no dejemos este vicio, que no se nos pase el efecto, sigamos con Dios, sigamos en Australia.