* «Jesús se da a sí mismo todo, porque la plenitud de Dios es una plenitud anonadada en la Cruz: Éste es el don de Dios: la plenitud anonadada. Y éste es el estilo del cristiano: buscar, recibir la plenitud anonadada y seguir por aquel camino. No es fácil, no es fácil esto. El signo de que nosotros vamos por este camino del todo y nada, de la plenitud anonadada, es la alegría»
En la noche..
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Las luces se esfuman y todo alrededor pierde forma, perfil, realidad. Todo
se desvanece. Nos gana la tristeza, la nostalgia por lo que teníamos y ya
no ...
Hace 2 horas